Cathrin Keller, experta alemana en Casa Real: "El hecho de que Carolina de Mónaco y Carlota Casiraghi sean madre e hija se refleja no sólo en su parecido físico, sino también en su estilo"

Desde que era una niña, Carlota Casiraghi ha tenido que escuchar continuamente que es la heredera del estilo de su madre, Carolina de Mónaco. Un cumplido teniendo en cuenta que la hermana del príncipe Alberto es una de las mujeres más elegantes del mundo, pero que podría haber hecho mella en la filósofa. 

La última aparición pública de la princesa Carolina en la 56 edición del Concurso Internacional de Bouquets en el Yacht Club de Mónaco ha empujado a la prensa alemana a hablar de la "competencia real" que existe entre madre e hija. 

"El hecho de que Carolina y Carlota sean madre e hija se refleja no sólo en su parecido físico, sino también en su estilo", asegura Cathrin Keller, experta en realeza, en la revista alemana Bunte. "Su look podría estar colgado en el armario de su hija", asegura la periodista haciendo referencia al primaveral vestido de tweed multicolor que estrenó para la cita. Un diseño estructurado de manga francesa y largo midi que le sentaba a las mil maravillas y que podría pertenecer a Carlota. 

 

 

 

 

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En el artículo publicado este lunes, Keller recuerda que ambas son embajadoras de Chanel desde hace años, una "herencia" que Carlota recibió de buena gana por parte de su madre y sus relaciones personales con la maison francesa y, en especial, con el fallecido Karl Lagerfeld. "En su vestuario predomina el tweed, con patrones sutiles y, por supuesto, los icónicos bolsos acolchados. Y eso es exactamente lo que caracteriza el último look de Carolina", manifiesta haciendo evidente esa comparación cada vez más habitual entre ellas.

Carolina de Mónaco cuida hasta el mínimo detalle de su estilismo y sin saltarse la temática del evento: 'Flores en movimiento', la monegasca elevó su look con unos salones con motivos florales y un original broche en forma de libélula. "Su hija Carlota habría recibido muchos elogios por esta elección", concluye. Pero, ¿es realmente Carlota una competencia para su madre, y viceversa? 

Así es la verdadera relación entre Carolina de Mónaco y Carlota Casiraghi

Carolina de Mónaco ha declarado en más de una ocasión que la distancia con sus hijos a veces se le hace cuesta arriba. Mientras que la princesa reside en el Principado, Andrea Casiraghi vive en Londres, Pierre en Milán y Carlota en París. La única que sigue a su lado es Alexandra. 

Aunque en los últimos años se ha hablado de un supuesto enfrentamiento entre madre e hija, nada más lejos de la realidad. El vínculo entre ellas es muy fuerte, Carolina ha sido el gran apoyo de su hija tras su divorcio y aunque han tenido que superar alguna que otra diferencia por las formas diferentes de ver la vida, siempre han llegado a un entendimiento. 

"La muerte de su padre [Stéfano Casiraghi] fue muy traumática para ella y sus hermanos. Su madre quería protegerlos y los crió lejos del alboroto del Principado. Así fue como Carlota se convirtió en una muy buena estudiante y se interesó por la equitación. Era una adolescente seria, nunca una chica fiestera", contó Pauline Delassus en una entrevista a 'Vanity Fair'.

Carolina siempre ha sido mucho más protectora con Carlota que con el resto de sus hermanos. Algo que la empujó a negarle el título de "princesa" con el objetivo de darle la oportunidad de elegir un futuro lejos del férreo protocolo real. La propia Carlota habló de la decisión de su madre que podría haberlo cambiado todo. "No soy una princesa. Ella lo es, yo no. Soy la sobrina de un Jefe de Estado. Y con este estatus, tengo algunos deberes de representación, nada muy restrictivo o muy excepcional", confesó al 'The New York Times'. 

La última vez que las pudimos ves juntas fue el pasado mes de marzo con motivo de la celebración del Baile de la Rosa, una gran fiesta en la que Carolina actuó de perfecta anfitriona y en la que estuvo arropada por todos sus hijos. Además, Carolina ha expuesto en más de una ocasión la magnífica relación que mantiene con su nieto Raphael, con el que comparte su pasión por la música y el que la acompaña en algún que otro acto público.