Antonio David: "Rocío Carrasco ha despreciado a mis hijos"

"Su madre no invitó a sus hijos al homenaje a su abuela", nos cuenta

Actualizado a 18 de mayo de 2016, 16:23

Dolido

“Me duele ese desprecio no te imaginas cuánto. Son los nietos de Rocío Jurado, no son dos que acaban de llegar”

Familia numerosa

Antonio David (40) estuvo casado con Rocío Carrasco (39) entre 1996 y 1999. De su matrimonio nacieron dos hijos: Rocío, que cumplirá 20 años en octubre, y un niño, que en diciembre llegará a la mayoría de edad. Actualmente, Antonio David está casado con Olga Moreno (39), con quien tiene una hija, Lola, de tres años

Sin contacto

“Si Rocío hubiera invitado a mi hija a la presentación del sello, no habría ido. ¿Cómo va a ir si lleva cuatro años sin saber nada de ella?"

Homenaje a 'La más grande'

“Rocío es capaz de utilizar un acto de homenaje a Rocío Jurado para lavar su imagen y perjudicar a su propia familia”

No cree que sea feliz

“No la veo feliz. Está sola, no se habla con su familia por dinero, ni con su hija”

Almas gemelas

Antonio David ha valorado la valentía de Gloria Camila, al enfrentarse abiertamente a su hermana Rocío Carrasco y a las Campos

Ruptura radical

Rocío Carrasco y Antonio David Flores no mantienen ningún tipo de contacto, pues solo se comunican a través de sus abogados

Relación madre e hija

“Mi hija no pasa de su madre en absoluto. Le duele que no esté ahí, no recibir ni siquiera una llamada suya”

Sentimientos

“Por Rocío no siento rencor ni orgullo ni odio. Solo siento pena. Llevo muchos años casado con mi mujer. Tengo otra vida ya”

Invitados a la boda

“Dicen que quieren hacer una boda íntima, no tienen más narices porque van a ir 20 personas. ¡Si no tienen relación con nadie!”

Antonio David Flores es un hombre herido. “Rocío Carrasco ha despreciado públicamente a mis hijos, me duele que ni te puedes imaginar”, cuenta a Lecturas en la que es su entrevista más descarnada. Rocío no invitó a los dos hijos que tuvo con Antonio David al homenaje a Rocío Jurado –la presentación del sello– que ella misma presidió hace unas semanas. Antonio David solo interrumpe la sesión de fotos para coger el teléfono a su hija, preocupado porque nunca llama si no es algo urgente. La ternura se dibuja en sus ojos mientras responde: “Aún estoy con las fotos, mi vida, luego sabré a qué hora llego”. Ro Flores se refugia en su padre del sufrimiento que le provoca que su madre no pregunte por ella desde hace cuatro años. En unos meses será más feliz: su hermano podrá vivir en Málaga con ella, su padre, su hermana Lola y Olga, su segunda madre.

Podrás leer la entrevista completa en la revista Lecturas