Perfil bajo. Íñigo Errejón (41 años) dejó atrás hace ya más de 6 meses los focos de los medios de comunicación con los que conectaba habitualmente y las cámaras que le seguían en los pasillos y alrededores del Congreso de los Diputados como portavoz de Sumar en la Cámara Baja.
Ha conseguido esconderse, pero la causa abierta contra él tras la denuncia de Elisa Mouliaá por un presunto delito de agresión sexualavanza y el mes de junio es clave, con nuevos testimonios en la instrucción que coordina el juez Adolfo Carretero.
El 10 de abril, un día antes de que la actriz entregara su teléfono móvil y el expolítico se negara a hacerlo, salía a la luz que se habían localizado a los dos taxistas que conducían los vehículos en los que viajaron en la noche de autos, donde ella dice que Errejón le puso tres normas.
En la revista Lecturas hemos conocido todos los detalles de esta cita clave y hemos analizado con el abogado de la acusación particular, Alfredo Arrién, los avances en la instrucción del caso. Algunas de las dudas que planean sobre la investigación pueden despejarse tras la declaración de los nuevos testigos.
Además, todavía está por confirmar la participación de un psicólogo que añadiría conclusiones a los análisis expuestos en los informes que ya fueron presentados y que llevaron a cabo José Capote y José Cabrera.
Los taxistas con los que viajaron
El viernes, 20 de junio, el juez Adolfo Carretero tomará declaración a cinco personas cuyo testimonio puede ser clave para responder a muchas de las preguntas que han quedado en el aire tras la denuncia de Elisa Mouliaá. Cuando la ratificó ante el magistrado, volvió a explicar las tres normas que supuestamente le puso Íñigo Errejón.
Según la actriz, fue en el taxi, cuando se dirigían a la casa en la que se habrían desarrollado los otros supuestos episodios de agresión sexual, cuando el expolítico le pediría que se mantuviera cerca, que si lo hacía volviera en poco tiempo y que le diera un beso. En uno de los coches se trasladaron desde el primer bar en el que estuvieron hasta la fiesta y en el segundo, hasta la casa del investigado.
GTRES
Para corroborar lo que está denunciando, el magistrado pidió a la defensa del exportavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados que entregara los justificantes de pago de los trayectos que hicieron por carretera. A.L. y V.H son las iniciales de los conductores localizados que tendrán que hacer memoria en menos de un mes para confirmar o no si le escucharon darle esas instrucciones a Mouliaá.
Cinco testigos clave en el caso Íñigo Errejón
Además de los taxistas que conducían los vehículos en los que viajaron Mouliaá y Errejón durante la noche en la que supuestamente se produjeron las presuntas agresiones sexuales, el juez instructor también escuchará a tres personas presentes en la fiesta, quienes también podrían arrojar mucha luz para el avance de la investigación.
Se trata de H.J.H, B.V y S.G., quienes declararán a las 10:30 horas y a las 11 de la mañana del viernes, 20 de junio. El primero de ellos estará de manera presencial en los Juzgados de Plaza de Castilla y es testigo directo presente en la fiesta durante la noche de autos.
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Las otras dos personas son los dueños de la casa donde habrían sucedido algunos de los hechos investigados. "Es previsible que la instrucción se alargue un poco más allá del verano, lamentablemente", contestaba a la revista Lecturas Alfredo Arrién, quien se muestra confiado en que pueda quedar demostrada la versión de su clienta con estas nuevas comparecencias judiciales.
Los propietarios de la vivienda no pueden estar físicamente en Madrid, así que responderán al magistrado desde la distancia, conectando por videoconferencia. Ellos podrán también aportar detalles de la fiesta, después de que Elisa contara cuando ratificó la denuncia que aquella noche bebieron mucho alcohol.
Periciales psicológicas
A los informes que presentaron el psicólogo José Capote y el psiquiatra José Cabrera se sumaría, en principio, la declaración de otro profesional que sumaría su visión a las periciales en este campo. Alfredo Arrién confirmaba a esta revista que se mantendría en el anonimato por voluntad propia, así que de momento no figura entre los citados el próximo 20 de junio.
Capote explicaba en Lecturas, precisamente, la importancia del análisis de la declaración de Errejón ante el juez. Con ella, llegaba a una importante conclusión final: "Evidentemente no hubo consentimiento por parte de Elisa Mouliaá. De hecho, la parte reduccionista es que si hubiera habido consentimiento, hubiera habido relaciones sexuales".
De acudir a Plaza de Castilla, serían seis los testigos que responderán a las preguntas de Adolfo Carretero en el escenario previo a la fase intermedia del procedimiento judicial al que se enfrenta el expolítico. Tanto desde la acusación popular como desde la particular se muestran convencidos de que el expolítico será imputado, aunque luego habrá que probar en el juicio oral los hechos denunciados por Elisa Mouliaá en octubre de 2024.