Lo tuvo muy claro desde el primer momento. Rocío Carrasco, en cuanto supo que su madre, Rocío Jurado, estaba enferma tomó una decisión respecto a sus hijos. Rocío y David Flores, todavía muy pequeños, estuvieron con su padre, Antonio David, mientras Rocío se trasladó a Houston para estar junto a la cantante. Desde entonces, la hija de Rocío Jurado pasó meses sin ver a sus hijos para poder estar con su madre…

Artículo recomendado

El golpe sobre la mesa de Rocío Carrasco ante la actitud de su familia en Houston

Rocío Carrasco

“Yo no dejo que mi madre hable con los niños”. Rocío Carrasco habla alto y claro acerca de cómo decidió comportarse en los últimos meses de vida de su madre. La hija de Rocío Jurado estuvo a su lado en todo momento, no se apartó hasta que llegó la madrugada en la que la cantante falleció. Y durante esos meses, tampoco vio a sus hijos. “Mi madre estaba mala, tenía una vocecita que era un hilito”, recuerda ahora Rocío.

“Yo conozco a Rocío y a David e iban a saber que algo no estaba yendo bien”, se sincera Carrasco. “Quería que recordaran a la yaya tirada en el suelo jugando con ellos, cantando o haciendo lentejas”. La hija de Rocío Jurado quería una normalidad respecto a sus hijos e intentó protegerles en el momento más duro. No fue hasta después del último adiós a la cantante cuando Rocío volvió a su casa de Madrid y pidió que le llevasen a los hijos.

rocío carrasco

Rocío Carrasco durante el episodio siete de 'Rocío: contar la verdad para seguir viva'.

Telecinco

Durante ese tiempo, los pequeños estuvieron en casa de Antonio David porque así pensó Rocío Carrasco que iba a ser mejor. Rocío y David se quedaron con su padre y, pese a lo que estuvo afirmando en este momento el ex guardia civil, sí se mantuvo en contacto con los hijos en todo momento, tal y como ha contado ahora en el documental.