Ivonne Reyes, durante una charla con Aída Nizar en GH VIP, ha dejado caer su teoría de que ha sido vetada por Pepe Navarro en numerosos programas de televisión. La venezolana ha querido hacer entrever que el presentador no la quiere en la pantalla, curiosamente desde donde está criticando esta ausencia de trabajo…
Desde hace un mes Ivonne es participante de pleno derecho de ‘GH VIP’, una aventura televisiva que llega después de años en los que más se ha prodigado como invitada más que como presentadora. Y ella está convencida a que esto es fruto de un veto que al que le tendría sometida Navarro.
En la conversación, cuenta a Aída que le ha pasado muchas veces recibir una llamada de teléfono por la noche, “a la una o a la una y media”, el día antes de entrar a trabajar en un nuevo proyecto. En esta llamada se le decía que lo sentían pero que se había caído del programa y que ya no iban a contar con ella. “No creas que solo me lo han hecho una vez, me ha pasado 7 u 8 veces”, le desvelaba a su compañera. Esto le dolía especialmente, pues para Ivonne Pepe estaba jugando con el pan de su hijo, “se estaba llevando por delante a sangre de su sangre”, afirmaba herida.
En el caso de ser real ese veto, sería muy extraño que le hubieran permitido participar en Gran Hermano, una experiencia televisiva en la que todo se graba 24 horas 7 días a la semana, y donde ella habla sin morderse la lengua del que fue uno de los hombres clave en su vida.
Y mientras habla de veto con Aída, a Sergio Ayala lo prefiere para olvidarse de los problemas que se desarrollan en el exterior. Los dos están cada vez mas juntos y la química entre ellos parece innegable, es más, podrían haberse dado su primer beso. El acercamiento no parece del todo claro, pues hay dudas de si el beso tuvo lugar en los labios o en la mejilla. De hecho, tienen tan buena sintonía que ya pasan las noches juntos. El momentazo tuvo lugar hace unos días, cuando, aprovechando la negritud de la noche, la presentadora se ‘coló’ en la cama de Ayala. Al día siguiente, Reyes confirmó a sus compañeros que fuera tiene alguien especial “que tiene que estar…”. Muerto de celos, ya le terminamos la frase a Ivonne.