Gabriela Guillén zanja, de una vez por todas, la polémica con Bertín Osborne tras el nacimiento de su hijo

La tensión entre Gabriela Guillén y Bertín Osborne (69 años) parece no amainar. Una semana después del nacimiento del hijo de ambos han sido ya varias las declaraciones y comentarios que se han profesado entre ambos. El primero en hacerlo era el cantante con su exclusiva en '¡Hola!', donde dejaba claro que no quería ejercer como padre. Días después, totalmente fuera de sí, lo hacía la fisioterapeuta que estallaba contra la prensa que se reunía fuera de su domicilio. Ahora, más calmada pero con una firme determinación, Gabriela ha vuelto hablar y ha zanjado, de una vez por todas, con Bertín Osborne.

Ha sido la periodista Beatriz Cortázar en 'Y ahora Sonsoles' la ha que transmitido las palabras que la modelo paraguaya ha compartido con ella. Lo primero que Gabriela ha querido justificar es su estallido de la semana pasada, un momento de nervios y emoción que dejo a todos conmocionados. "El otro día me explicó que el enfado se debió a que no quería y pidió que su madre, que es persona anónima y ha venido de su país para cuidar a su hijo, que no quería que le hicieran fotos. Quería conservar su privacidad”, ha compartido Beatriz. De esta manera, cuando salió de casa y se vio rodeada de fotógrafos, mientras iba acompañada de su madre, Guillén sintió miedo porque su madre dejara de ser anónima e intento protegerla.

Sobre el padre de su hijo, ella mismo dejaba claro que no pensaba contestar nada que tuviera que ver con el cantante. Así lo ha reafirmado Beatriz tras hablar con ella. “En lo que toca a Bertín está enfadada por diez. Me dice frases contundentes. No quiere saber nada de esa persona y me ha dicho que para ella se ha muerto esa persona", ha explicado. Una dura sentencia que es fruto de el mal rato que está pasando en los primeros días de su hijo por las palabras de Osborne. "Dice que es el responsable de todo esto que le está pasando. Le parece una cobardía lo que ha hecho y no quiere nada relacionado con él, ni que se lo nombren”, ha terminado Beatriz.

La drástica decisión de Gabriela Guillén respecto a Bertín Osborne

Estas palabras de Beatriz Cortázar se complementan con las que Raquel Arias, amiga de la modelo, había expresado en 'Así es la vida' apenas unas horas antes. La colaboradora, que no ha dudado en defender a Guillén en todo momento, ha asegurado que la fisioterapeuta no quiere saber nada del cantante. "Sigue sin saber nada de Bertín, ella decidió tenerlo sin sentir su apoyo”, ha recordado sobre la determinación que Gabriela tomó hace meses de traer este niño al mundo.

Una decisión que se ha consolidado tras las duras declaraciones de Osborne, que han coincidido con el nacimiento del pequeño. “No ha recibido nada de él, por eso ahora Gabriela no quiere saber nada tampoco”, ha dicho Raquel. Y es que, según Arias, Gabriela no habría recibido ni un mensaje de enhorabuena por parte del presentador. “Tú imagínate la felicitación que ha tenido desde el nacimiento de su hijo, que ha sido una exclusiva diciendo las cosas que ha dicho, dando a entender que no quiere saber nada de su hijo”, ha lanzado. Toda esta situación y el hecho de no haberse recuperado todavía del complicado parto que sufrió ha impulsado a Gabriela a no solo tomar la decisión de desvincularse de una vez por todas de Bertín, sino de alejarse de polémicas y del foco mediático. 

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Tras leer las declaraciones de Bertín, la reacción de la fisioterapeuta era la más esperada y buscada. Y no defraudó. Mientras salía de su domicilio, seguida por su madre y una amiga, Gabriela se habría acercado a la prensa, fuera de sí, y les había interpelado por estar haciendo guardia en su casa. "No voy a permitir que me sigáis acosando de esta manera. He sido muy respetuosa con todos vosotros y no lo voy a permitir más. No podéis estar aquí 24 horas. No os lo voy a permitir más. No puedo ir al medico y no puedo hacer nada. Lo siento muchísimo. He sido super cordial con todos vosotros, pero no puedo permitir este acoso esto", comentó, muy nerviosa, Guillén.

A medida que se veía cada vez más rodeada y viendo que su madre se exponía, la modelo se puso más frenética. "No me encuentro bien por todo lo que he pasado. Se qué hacéis vuestro trabajo, pero ¡no puedo más!", estalló. Después de estas declaraciones y tras todas las emociones acumuladas, Gabriela se ha derrumbado y con la voz rota ha suplicado que se acabe la polémica. "Esto se ha vuelto loco. Os lo pido por favor. Estoy fatal, de verdad. Solo quiero criar a mi hijo en paz. Os lo pido por favor".

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