Fran Rivera apoya a Kiko en GH DÚO ¡pero sin gastarse un céntimo!

 Fan, pero sin ver el reality porque “empieza muy tarde”. Y fan sin rascarse el bolsillo. El extorero tiene muy claro cuáles son los límites que no piensa traspasar por ver a Kiko convertido en ganador y prefiere dejar a la audiencia que sea ella soberana y quien escoja a su favorito. Él tiene muy claro que su hermano por parte de padre ha hecho un gran trabajo en el programa y que se ha mostrado real 100%.

Fue uno de los primeros en opinar de lo bien que lo había hecho el padre de tres al contar el calvario que había atravesado debido a las drogas. Le pareció que su discurso había sido sobresaliente y que, de este modo, todos alcanzaríamos a entender mejor al otro hijo de Paquirri. 

“Se está viendo al Kiko que es realmente. Está haciendo un concurso fantástico. Lo está bordando, el tío”, cuenta Francisco que también cree que su cuñada Irene está haciendo un papel estupendo en el reality, “les veo a los dos ganadores”. Y se barrunta que no habrá sido una experiencia fácil para ninguno, “tienen que estar echando de menos a sus hijos una barbaridad, no quiero ni pensarlo. Yo no sería capaz de estar tanto tiempo sin ver a mis hijos, aunque todo es la necesidad”, ha apuntado en un evento de joyería

Y sobre Irene, Fran solo tiene palabras buenas y de admiración. “Irene ha sido un ángel que ha venido a ver a mi hermano. Lo adora y él la adora a ella. Ella ha sido un pilar importantísimo para su vida”, sentencia.

Aunque entre tanta palabra buena, Fran, más sincero que nunca, reconoce que no se está dejando los cuartos en hacerles ganadores, como si lo están haciendo los Pantoja. Cuando se le pregunta si él está mandado mensajes, él asegura que “eso ya es demasiado”. Pues nada, menos mal que ahí está Anabel que se va a gastar su sueldo de influencer.

La última vez que Kiko salió nominado, su prima admitió enviar "250 mensajes por la mañana y 250 por la noche", después, y tras hacer un calculo más real y no tan hinchado, reveló que habían sido bastantes menos pero sí que fácilmente se había podido fundir entre 4.000 y 5.000 euros en salvar a su primo.