Ordenadores, televisores, 2.000 euros en efectivo y hasta el anillo de pedida de Irene. Kiko Rivera ha denunciado el robo que se produjo en su casa sevillana este fin de semana y cada vez más datos salen a la luz. Una de las últimas informaciones hacen pesar que el objetivo del robo se produjo debido a un ajuste de cuentas, tal y como se ha dicho en ‘AR’.
La periodista Rocío Romero, que desde este fin de semana ha estado muy pendiente de lo ocurrido en el domicilio de Rivera, se ha hecho eco de algunas de la cosas que no le cuadran a la Guardia Civil, como que todo estuviera ordenado y que, aún así, dieran con objetos tan específicos como el anillo de pedida. Además, les escama que Kiko no pueda presentar ninguna factura de su compra y que la joven se lo quitara, cuando se lo hemos visto en el dedo cada día desde que se lo regalara su chico en le bautizo de su hija. La joven ha dicho que no llevaba porque hacía demasiado calor y le molestaba.
La policía se encuentra cada vez más cerca de los ladrones, aunque la búsqueda se haya dificultado por la ausencia de huellas en la casa. Por suerte, se ha puesto en contacto con ellos un hombre al que, supuestamente, estos ladrones trataron de vender el ordenador que habrían sustraído de casa de Rivera, y que podría contener material sensible.
Una de las últimas hipótesis que está ganando cada vez más peso es la del hurto por un posible ajuste de cuentas. Según Rocío y Paloma García Pelayo, el DJ ha adquirido unas deudas por la compra de un coche.
Lo que sí que parece cierto es que se trata de un robo preparado y hecho a conciencia, ya que Rivera ha asegurado que se sintió muy vigilado los últimos días.