Lo ha vuelto a hacer. Unas horas después de dejarse ver paseando como dos turistas más por las calles de Florencia, Charlene (45 años) y Alberto de Mónaco (65 años) reaparecían envueltos en una enorme expectación a las puertas del Palazzo Vecchio. El matrimonio, que en todo momento se mostraron unidos, cómplices y cariñosos, ha presidido la cena de gala con motivo del 160º aniversario de la Fundación del Consulado del Príncipe de Mónaco en la ciudad italiana.

Artículo recomendado

¿Va en chándal? El comentadísimo look de Charlene de Mónaco en su visita a Florencia con Alberto

Charlene y Alberto de Mónaco

Si por la mañana nos sorprendió con un cómodo dos piezas de lino que se confundía con un chándal, para la noche tenía guardado una auténtica joya, estilísticamente hablando. Charlene de Mónaco brillo (literalmente) con un impresionante vestido de lentejuelas y transparencias de color negro. Se trata de un diseño hecho a medida, con corpiño y delantal de paillettes que le sentaba como un guante.

Alberto y Charlene de Mónaco
GTRES

Confeccionado con mimo sobre seda, el escote de tul semitransparente presentaba el cuello redondo, mientras que el resto del cuerpo estaba plagado de lentejuelas. El vestido concluía en una falda de vuelo en forma de A que a cada paso dejaba una estela de brillo sensacional. Una vez más, Charlene ha recurrido para este acto tan especial a la firma de lujo Akris, que se ha convertido ya en su marca fetiche.

Una vez más, Charlene ha transformado el diseño original y en este caso le ha añadido unas mangas de tul, un extra con el que ha ganado más finura y delicadeza. Aunque su precio es de 4.350 euros, se trata de una pieza tan elegante y versátil que ya está casi agotado en la web de la firma suiza.

Vestido de lentejuelas de Akris
Akris

Sin riesgo en cuanto a los complementos, la sudafricana se decantaba por salones y cartera de mano también de color negro. Un total look black muy elegante y sofisticado que nunca pasará de moda.

Charlene de Mónaco da un giro a su peinado

En los últimos meses Charlene se había acostumbrado a peinar su icónico corte pixie hacia abajo dejando el discreto flequillo a un lado. Pues lejos de lo que se pueda pensar, este tipo de cortes tan extremos tienen muchas opciones y la princesa de Mónaco lo confirmaba en esta gala con un peinado más rompedor. La mujer del príncipe Alberto decidía descubrir su rostro con un favorecedor tupé con el que ganaba mucho más volumen. ¿El resultado? Un tupé efecto mojado, la forma cómoda y original de llevar la cara despejada con estilo.

Charlene y Alberto de Mónaco

Charlene y Alberto de Mónaco, envueltos en una gran expectación en Florencia

GTRES

Charlene de Mónaco zanja los rumores de divorcio

Aunque Charlene ya se dejó ver al lado de su marido en el homenaje a Rainiero de Mónaco en el Principado, este viaje a Florencia ha terminado de zanjar por enésima vez los rumores que apuntaban a que su matrimonio había terminado. La sudafricana se mostró especialmente cariñosa con su marido, de quien no se separó en ningún momento. De hecho, permaneció agarrada a él durante todo el paseo que se dieron por el centro de la ciudad.