Una experta en protocolo habla a Lecturas de los secretos del marquesado de Rafa Nadal: "No se trata de un simple reconocimiento, sino de una distinción anclada en una de las tradiciones más antiguas de la monarquía"

El 11 aniversario de la Proclamación de Felipe VI como Rey de España ha traído consigo la concesión de los primeros títulos nobiliarios de su reinado a seis personalidades españolas con “excelentes trayectorias”. La lista está compuesta por nombres tan populares como Rada Nadal, nuevo marqués de Llevant de Mallorca, Luz Casal, marquesa de Luz y Paz, o Jaime Alfonsín, marqués de Alfonsín con Grandeza de España, entre otros. "Son exponentes de la excelencia, ya sea al servicio de la Corona o en el ámbito del pensamiento, la cultura, la ciencia, las artes y el deporte", cita el comunicado.

Pero, ¿qué supone ser marqués?¿Tiene algún beneficio económico?¿Pasará de generación en generación? En Lecturas hemos tratado esta novedad institucional con María José Gómez Verdú, experta en etiqueta y protocolo. 

"No se trata de un simple reconocimiento público, sino de una distinción anclada en una de las tradiciones más antiguas de la monarquía española: la de ennoblecer a quienes, con su trayectoria, han contribuido de manera excepcional al prestigio colectivo de la nación", nos explica la experta. 

A lo largo de los años se había hablado mucho sobre la llamativa decisión de los reyes de no otorgar ningún título nobiliario, pero lo cierto es que Felipe VI estaba aguardando un momento especial para hacerlo público. Y qué mejor que el aniversario de su ascenso al trono. 

¿Qué implica adquirir un marquesado?

Desde la óptica del protocolo, Gómez Verdú destaca que este otorgamiento "introduce a la persona distinguida en el ámbito del tratamiento honorífico, otorgándole el título de “Ilustrísimo Señor” o “Ilustrísima Señora”, sin que ello implique, en la actualidad, ningún tipo de prerrogativa legal o de poder político". 

Eso sí, lejos de lo que se pueda pensar, la experta ha querido dejar claro que "el título en sí no comporta beneficios económicos ni privilegios materiales. No otorga rentas, no concede pensiones ni modifica la relación del nuevo marqués o marquesa con la Hacienda Pública ni con las instituciones". Se trata de un honor simbólico "que sitúa a sus titulares en un lugar de referencia moral y social, reconocido por la Jefatura del Estado.

Un marquesado hereditario para casi todos

María José advierte que es importante saber distinguir entre los títulos de carácter hereditario y los vitalicios. Según ha informado Zarzuela, el monarca ha designado a Rafa Nadal como marqués de Llevan de Mallorca; a Teresa Perales como marquesa de Perales; a Luz Casal como marquesa de Luz y Paz; y a la fotógrafa Cristina García Rodero nueva marquesa del Valle de Alcudia, todos con carácter hereditario a excepción de el bioquímico y biólogo molecular, Carlos López Otín, marqués de Castillo de Lerés con carácter vitalicio.

En el caso de Rada Nadal, por ejemplo, el título le será transmitido a su hijo Rafa conforme a las reglas del derecho nobiliario vigente en España. Otros, sin embargo, son estrictamente vitalicios, es decir, quedan vinculados únicamente a la persona distinguida y se extinguen con su fallecimiento. "Esta diferencia responde a un criterio claro: subrayar la excepcionalidad del mérito individual sin necesariamente perpetuar la distinción en el linaje", nos explica la experta.

"La monarquía, al optar por estas fórmulas, reafirma su papel institucional como garante de la cohesión simbólica del país, honrando a quienes han contribuido a la excelencia desde la cultura, la ciencia o el deporte, con un gesto profundamente significativo que, si bien no transforma la condición civil de quienes lo reciben, sí eleva su figura dentro de los códigos del reconocimiento estatal", ha sentenciado. 

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La reacción por parte del ex tenista se está haciendo de rogar, pero por todos es conocido la buenísima relación que Rafa Nadal siempre ha tenido con los miembros de la familia real, especialmente con don Juan Carlos. Y es que cabe recordar que el emérito fue uno de los invitados a su boda con Mery Perelló en Palma de Mallorca.