Alarma en Buckingham: el verdadero estado del rey Carlos III exige tomar medidas inmediatas

Medios británicos y, sobre todo, estadounidenses ponen el foco en la información que la Casa Real británica estaría ocultado sobre el estado de Carlos III

José Confuso

Director digital de Lecturas

Actualizado a 26 de abril de 2024, 11:39

Gtres
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“Se encuentra muy mal”. Es el titular que corre desde hace horas por medio mundo. Comenzaba en ‘The Daily Beast’ y acababa situándose en portada de ‘The New York Post’. El estado real de Carlos III sería mucho peor del que ha querido transmitir la Casa Real británica. Mientras fuentes oficiales afirmaban que el monarca estaba respondiendo muy bien al tratamiento contra el cáncer que sigue, otras fuentes más oficiosas afirmaban a los citados medios que esto no sería exactamente así.

La salud del rey Carlos se estaría deteriorando progresivamente. “Por supuesto que está determinado a vencerlo”, aseguran estas mismas fuentes. “Están poniendo todo el empeño en lograrlo”. Una batalla médica que no estaría dando los frutos que se esperaba. El monarca se encuentra débil y las alarmas han saltado ya en Buckingham, según estas fuentes. Los ayudas de cámara del rey Carlos se encontrarían revisando ya el plan para su funeral, como se hizo con su madre, la reina Isabel II.

Llama la atención que todas las informaciones publicadas se remitan directamente a fuentes cercanas recogidas únicamente por ‘The Daily Beast’. Las últimas apariciones del rey Carlos, tanto en la misa del domingo de Pascua como en algunos compromisos institucionales que ha realizado, poco casan con esta alarma inesperada. El rey mantenía un aspecto y una vitalidad muy cercana a la que siempre ha mostrado. ¿Qué está pasando realmente en Palacio?

Los preparativos para el funeral del rey Carlos III

No es una novedad que de forma periódica se revisen los protocolos para el funeral de los reyes en Reino Unido. El del rey Carlos III se confeccionó en el instante posterior al fallecimiento de la reina Isabel II y es habitual que constantemente se rescate para que nada quede fuera del estricto control. Como pudimos comprobar con el de la reina Isabel, los actos que componen la despedida de un monarca británico son numerosos, complejos y llenos de detalles que deben funcionar perfectamente. El engranaje es fundamental para que todo salga bien.

Los 75 años que ha cumplido ya el rey Carlos y la situación que padece tras serle diagnosticado un cáncer hacen que sea lógico que se revise todo lo relacionado con u futuro funeral del jefe de Estado. Estas mismas fuentes que recogen los medios americanos afirman que no es nada más que lo lógico cuando se trata de un rey con una enfermedad como el cáncer pero que su puesta en circulación -la de los documentos del funeral- ha causado alarma.

Fuentes militares han confirmado a ‘The Daily Beast’ que la actualización de la Operación Menai Bridge, tal como se ha bautizado todo lo relacionado con el funeral de Carlos III, es un procedimiento estándar. “Ver algo más es absurdo”, aseguran las voces consultadas. Un soplo de alivio para todos los que ya temen que el reinado de Carlos III vaya a ser mucho más corto de lo que se podía imaginar.

¿Hay alarma en Reino Unido por la situación de Carlos III?

La publicación de esta noticia por parte de los medios americanos no ha tenido un eco consistente en los periódicos británicos. Los medios que siguen habitualmente todas las noticias relacionadas con la Casa Real han hecho, por el momento, oídos sordos a la crisis institucional que se avanza desde Estados Unidos. ¿Qué hay de cierto en todo esto? Bien es verdad que desde que Kate Middleton compartirse su situación actual, el tacto con la Familia Real ha sido considerable. No dejan de ser, tanto la princesa de Gales como el rey, dos enfermos que se encuentran en tratamiento.

Los principales columnistas expertos en monarquía guardan silencio sobre estas fuentes que alertan de la complicación en el estado del rey Carlos. ¿Una medida de previsión tras el escándalo que se formó con Kate Middleton? Si algo se ha aprendido en estos últimos meses ha sido a tener algo de mesura. La desaparición de Middleton tras haber sido intervenida generó una oleada de rumores y especulaciones que causó no solo un importante dolor en la familia, sino también una crisis institucional sin precedentes. Es momento de poner algo de freno.

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