Aunque la propia Maite Galdeano (55 años) confesó hace solo unos días que había dejado de seguir a Sofía Suescun y Kiko Jiménez en redes sociales, lo cierto es que la de Pamplona está al tanto de los pasos de la pareja.
Con el objetivo de poner distancia, Sofía y Kiko viajaban a Linares (Jaén) para pasar unos días en casa de la madre del colaborador. Conscientes del sufrimiento de la pareja, Carmina les acogió con los brazos abiertos y les dio la mejor de las bienvenidas agasajándoles con sus platos de comida favoritos, un reencuentro familiar al que también se sumaron los abuelos de Kiko y del que él mismo ha presumido a través de Instagram. "Esto es vida. Verlos así después de 60 años de casados", escribía junto a una imagen muy divertida de sus abuelos.
En las imágenes, Sofía ha recuperado en cierta parte la sonrisa después de semanas muy complicadas en las que decidió romper de manera radical con su madre tras un encontronazo muy desagradable a su regreso de 'Supervivientes: All Stars'. "Han sido de los peores días de mi vida (...) Cada día es peor y creo que todavía no soy consciente de todo lo que ha pasado. Lo que pido es libertad y ser libre, no vivir con esa presión que me quitaba las ganas", reclamaba Sofía completamente desolada en su reciente entrevista en 'De viernes'.
Convencida del paso que ha tomado pese al profundo dolor que le supone estar lejos de su madre, Sofía mira al futuro con ganas e ilusión. "Ahora toca recomponerse y a disfrutar de este maravilloso regalo que es la vida, donde solo hay una y pasa muy rápido", confesaba.
La reacción de Maite Galdeano al reencuentro familiar de Sofía Suescun con la familia de Kiko Jiménez
Estos días en familia habrían caído como un jarro de agua fría para Maite Galdeano, quien sigue instalada en el apartamento playero que posee en Murcia. No obstante, lejos de arremeter contra la pareja, la de Pamplona reaparecía compartiendo parte de su rutina diaria.
"Resistiré con la ayuda de Dios", escribía. Unas palabras que reflejan como encara la que ya se ha convertido en una guerra mediática contra Sofía y Kiko. Después, bajo una banda sonora de lo más animada que retumbaba en las paredes de su casa, mostraba la forma en la que afrontaba la semana con energía y compartía parte del nutritivo desayuno que se había preparado: un bizcocho proteico con frutos secos, un flan y un buen tazón de café con leche.
Después, como cada día, Maite aprovechará para hacer deporte y salir a pasear por el paseo marítimo junto a su perrita, la única compañía que tiene desde que hace tres semanas abandonara la casa que compartía con su hija en el norte de Madrid.
Con esta reacción apresurada, parece que la intención de Maite es dejar espacio a su hija, aunque no duda en mostrar su controversia hacia Kiko Jiménez cada vez que tiene la oportunidad con vídeos del pasado en el que definen al colaborador como un hombre sin escrúpulos que no quiere a nadie.
La petición desesperada de Maite Galdeano a su hija Sofía Suescun
Para Maite Galdeano, Sofía es lo más importante y piensa hacer todo lo que esté en su mano para salvar la relación con su hija. Así, a través de un comunicado publicado a través de su perfil de Instagram, la de Pamplona se dirigía a la influencer.
"Querida Sofía. La familia está en un estado de estrés que no se puede aguantar y no podemos solucionar nuestros problemas por nosotros mismos. Por eso, pienso que una mediación familiar que incluya un psicólogo familiar para todos es la mejor opción", así empezaba un texto conciliador en el que Maite daba un paso al frente reconociendo que ambas necesitan la ayuda de un profesional para solucionar sus problemas familiares. Sin más dilación, la que fuera concursante de 'Gran Hermano' le comunicaba a su hija que tenían una cita en el Centro de Apoyo a la Familia. "Por favor, acepta la mediación", imploraba Maite de manera pública. Algo que, al menos por el momento, Sofía se resiste a llevar a cabo. "Mi madre me ha arruinado amistades, relaciones y en muchos momentos la existencia", clamaba la influencer completamente sobrepasada por la situación que su madre le ha llevado a vivir.