Anita Williams, 27 años: “En la cárcel un día hubo un percal. Me pegaron por la espalda y yo me puse a chillar. Me castigaron sin permisos”

La concursante de ‘Supervivientes 2025’ ha relatado algunos de los episodios más difíciles de su paso por prisión

Anita williams
Telecinco

Para Anita Williams la cárcel no es un tema tabú, pero sí es uno que le duele recordar. De hecho, cuando habla sobre él, le gusta pasar de puntillas, sin entrar demasiado en el verdadero drama que supuso para ella estar encerrada en una mínuscula celda de tres por tres metros cuadrados.

Su paso por ‘De viernes’ ha servido para conocer un poco más a esta joven madre y que relate aquellas vivencias que la hicieron ser más dura y que transformaron su carácter. Quizás, una de las peores tuvo que ver con los celos de la novia de otra presa, y que acabó con Anita agredida y sin poder pasar junto a su familia la noche de fin de año. 

“Hubo una chica que medio se fijó en mí, pero yo la tomaba como una amiga”, empezó a relatar a los colaboradores del programa que deseaban conocer con más detalle aquello que la joven había pasado. “A las dos semanas y media vino su novia, que estaba de permiso, y se pensaba que yo me estaba liando con ella”. 

Ese reencuentro de las tres mujeres en prisión provocó que saltaran chispas entre ella. Y es que la presa no creía la versión que le ofrecía Anita, en la que sostenía que a ella le gustaba los hombres y que la otra joven tan solo era una buena amiga. 

“Un día hubo un ‘percal’. En el módulo, yo vivía hacia la izquierda y la novia de mi amiga hacia la derecha. Ese día, subiendo por las escaleras, ella me pegó por la espalda y yo me puse a chillar; así que vinieron los guardias”. 

¿El resultado de ese encontronazo? Una amonestación para Williams que se quedó sin permisos durante un buen tiempo. Esta conducta fue considerada disruptiva y le cancelaron algunos de sus privilegios, entre ellos -y el más importante- las salidas a casa. Entonces Anita ya estaba finalizando su condena de cuatro meses, por lo que había empezado a disfrutar de esta clase de concesiones. Aquel año, y debido a esa agresión, la de ‘Supervivientes 2025’ se tuvo que comer las uvas de fin de año en la cárcel. “Prometí que a, partir de entonces, siempre las comería en mi casa con mi familia”. 

Sin duda, ese fue su momento más bajo; aunque también destaca la agonía que le provocaba pasar 12 horas aislada y sin poder comunicarse sin nadie. “Viví la cárcel como si estuviera en una película. Me convertí en la clase de persona que nunca había querido ser”, confesó a la audiencia de ‘De viernes’. 

En su módulo, tal y como ella cuenta, había presas muy diversas. Algunas estaban cumpliendo condena por delitos mayores y otras por cuestiones menores como fue su caso. 

Anita Williams acabó cumpliendo condena en una cárcel madrileña después de que no cumpliera con las 300 horas de servicios a la comunidad que la Justicia le reclamaba no solo por la sustracción de un bolso, sino por haber entregado un DNI que no era el suyo. “Yo tenía 18 años y llevaba dos semanas en la academia de los Mossos de Escuadra”, ha desvelado. Como no cumplió con las horas que le requirió el juez, la joven pasó a estar en orden de busca y captura. Y, durante un viaje a Madrid, la policía se personó en el hotel y se la llevó presa. No imaginaba ella que, después de aquello, lo siguiente que haría sería entrar en una celda.