Parece que hay personas que están predestinadas a estar solas. O bien porque no han querido o por no haber encontrado a la persona adecuada. Hay quien llegada cierta edad no havvivido mucho en el terreno amoroso. Es el caso de Jesús (60 años), un administrativo en excedencia de Gandía que asegura ser rarito. "Me veo que quedaría en un margen de la sociedad que no es mayoritario", ha reconocido a las cámaras de 'First Dates' a su llegada. Dedica su vida a escribir libros sobre su vida en conexión con la espiritualidad. "He tenido experiencias místicas, como por ejemplo, el origen de todo esto que será Dios y todo esto", ha añadido.
No cambió su forma de concebir el amor, pero es cierto que en este campo tiene menos experiencia. Busca a alguien que sume en su vida y con la que se sienta querido. Hace 20 años que no tiene una pareja. Aunque Rosa (58 años), una desempleada de Alicante, no le ha llamado la atención en una primera impresión, sí cumple con el resto de requisitos. Para ella, Dios lo es todo y es algo que comparten y que les ha ayudado a que la conversación durante la cena fluya.
Jesús le ha contado todas sus experiencias espirituales. Ella las ha escuchado con mucha atención pese a no haber tenido la oportunidad de hablar mucho. Le ha encantado que se dedique a escribir. "Empiezan a pasarte visiones, mensajes... y empiezas a tener experiencias de Dios, de lo transcendente, de la luz, de la verdad… y al final dije que daba para un libro", le ha admitido. Ella también ha reconocido haber tenido experiencias paranormales. "Yo veía a mi hermana que una vez se encontró a mi abuela a los pies de la cama y dices eso es imposible, pero no, están ahí", ha comentado Rosa.
Todo fluía hasta que Rosa ha sabido que Jesús no ha tenido muchas experiencias amorosas en su vida. Es algo que le ha extrañado. "No me he casado ni he tenido hijos, no me ha llevado por ahí la vida. No he convivido. He tenido cosas, pero no he tenido pareja estable. Nunca cuajó hasta comprometerme. Igual no he nacido para tener pareja. Con decirte que llame una noche a una tarotista para preguntarle cómo me iba a ir en el amor y pasó el tiempo y la mujer echaba cartas y a la tercera o cuarta vez, solo le salía el ermitaño", le ha contado.
Con esta anécdota, Rosa se ha hecho a reír. Su reacción detrás de cámaras ha sido diferente. Ha apuntado que sí creía que era extraño: "Madre mía, no tiene otra cosa que hacer que creerse eso a estas alturas". La química no ha terminado de aparecer entre ellos y la soltera ha dicho no a una segunda cita con Jesús: "No porque no he sentido ese feeling que necesito y el físico no me ha cuadrado, pero por lo demás bien".
