La princesa Beatriz de Orleans (83 años): "El mejor consejo de belleza que siempre doy a mis nietas es que no se duchen tanto"

La revista Lecturas ha podido charlar con Beatriz de Orleans y nos ha desvelado algunos de sus secretos de belleza para estar estupenda a sus 83 años. La francesa asegura no ser tan constante con su rutina facial aunque nunca falla con la limpieza, el paso más importante de la rutina facial, y nunca le falta una buena crema de noche. Su pelo es lo más importante para ella y lo cuida al máximo, así no es de extrañar que tenga de las canas más envidiadas, pero nos ha contado mucho más. Por ejemplo, qué consejo de belleza es el que da a sus nietos y nietas.

"Mira, yo creo que se lavan demasiado. Tiene una obsesión brutal con la ducha. Justo hoy se lo he dicho a mi nieta: la piel es vida y la piel se renueva poco a poco, yo creo que si la limpiamos tanto al final no le da tiempo de regenerarse. Te obsesionas y se tienen más alergias, más problemas... La piel pierde esa capa y claro; es lo que les digo, la pasáis tres veces al día por una ducha", nos cuenta la princesa.

Para Beatriz de Orleans la ducha es importante pero en su justa medida. "Con lo cual mi consejo es no ducharse tanto. No hay que que ducharse cuatro veces o tres veces al día. Y si te quieres refrescar no uses jabón en todas, no sirve de nada. Es que quitáis toda la protección de la piel. ¿Has visto que hay mucho más alergia, hay mucho más problema de piel que antes? Porque claro, es que la piel no le da tiempo de vivir. Con agua es suficiente. Y muchos menos usar esos jabones con tantos colores que no sabes que tienen, como los caramelos de los niños", nos explica en esta entrevista la aristócrata.

Lleva mucha razón Beatriz de Orleans, y sin duda es un gran consejo. Raquel González, cosmetóloga y y creadora de Byoodé, lo respalda. "Ducharse de seis a ocho veces por semana es una cifra más que adecuada para una higiene corporal correcta. Hacerlo más a menudo puede producir que arrastremos y eliminemos en exceso determinados componentes que son necesarios para una buena salud de la piel", comenta la experta.

A esto añade: "Si cogemos como costumbre ducharnos dos veces al día, es probable que destruyamos los ácidos grasos esenciales que protegen la hidratación de la piel. Al mismo tiempo, eliminaremos todas las bacterias buenas que nos defienden de los gérmenes".

Otros errores que cometemos al ducharnos

• Hay que tener en cuenta el jabón que utilizamos. Mucho mejor optar por jabones que se complementen con ingredientes nutritivos o humectantes, como la manteca de karité.
• Es mejor no usar esponja, ya que acumulan muchos gérmenes. Y de hacerlo mucho mejor si son de origen vegetal. Las esponjas son el hogar perfecto para los gérmenes, sobre todo en los formatos que más tardan en secarse. Es mejor ducharse sin esponja, pero puestos a tenerla, son mejores las de malla, ya que no acumulan la humedad.
• Mejor ducharse con agua tibia que muy caliente. "Lo suficientemente caliente como para derretir determinadas impurezas, pero no tanto como para eliminar sustancias buenas para la piel", explican desde Medik8.
• Y, por supuesto, hidratar la piel tras la ducha. "Aplicar una crema hidratante después de lavarnos para recomponer el nivel de lípidos que hayamos podido perder, equilibrar el pH de la piel y aportar hidratación. Igual que aplicamos una crema o un suero en la piel del rostro después de limpiarlo, el resto de la piel necesita cuidados similares", comentan los expertos de Boutijour.   

Geles de ducha y un aceite recomendados por los farmacéuticos 

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