Raquel Bollo ha vuelto a 'Sálvame' después de dar el bombazo de la semana. La colaboradora televisiva entraba en cólera después de que sus compañeros destaparan que su hijo Manuel y su novia Junquera están esperando su primer hijo. Una noticia que este jueves ha confirmado y que ha admitido que la ha hecho "muy feliz". Sin embargo, la confirmación de su propio embarazo dejaba en mera anécdota que fuera a convertirse en abuela por partida doble.
La diseñadora y tertuliana ha reaparecido en plató después de que, en caliente, llegara a verbalizar la advertencia de que no iba a volver. Más tranquila y con las palabras medidas, lo primero que ha hecho Raquel ha sido hablar del futuro miembro de la familia. "Para mí es una noticia feliz. No me pilla de sorpresa que mi hijo vaya a ser padre. Mi hijo lleva mucho tiempo viviendo con su novia, tiene su carrera y llevan una vida estable", confirmaba seria, y deslizando que lo que más le disgustó fue que no se respetaran los tiempos de Manuel y Junquera, y que fueran ellos los que dieran la noticia cuando ellos lo consideraran oportuno.
![Raquel Bollo 03](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 505"%3E%3C/svg%3E)
"Mis hijos viven de mí y de mi trabajo, pero no creo que deban padecer las consecuencias. Y ya os habéis puesto muchas veces en contacto con Manuel y no entiendo por qué esta vez no ha sido así", le decía a Paz Padilla. Raquel ha dado también algunos detalles del embarazo de Junquera, que está "de un mes y una semana".
Respecto a la noticia de su propio embarazo, Raquel no se ha pronunciado y se ha centrado en justificar su monumental enfado y en reprochar el comportamiento del programa con la intimidad de su hijo y de su pareja. 'Sálvame' también ha emitido las imágenes de la colaboradora durante la publicidad donde se reafirmaba en la idea de que "en el programa no valen todos igual".
La diseñadora ya habló de su deseo de volver a ser madre en una reciente entrevista para Lecturas. La colaboradora admitió, en exclusiva, que no descartaba todavía, a sus 44 años, convertirse de nuevo en madre. "Siempre dije que cuando tuviera una vida estable, me gustaría ser madre. Si viene y Dios me lo manda, perfecto, pero no es una obsesión. (...) Ahora, podría quedarme en casa y disfrutar", contaba en aquella ocasión.