No se puede estar en todas partes, salvo que seas Isabel Preysler (71 años) que parece tener el don de la omnipresencia, de modo que ayer sábado tuvo que cumplir con dos importantes compromisos. Uno, la boda de Cristina Reyes, su estilista, y otro, el 80 cumpleaños de Alberto Alcocer, quien fuera gran amigo de su último marido, Miguel Boyer. Isabel no quiso perderse ninguno de los dos acontecimientos, así que, junto a sus hijas Tamara Falcó y Ana Boyer, asistió a la boda de Cristina Reyes y Jorge Puras, aunque no se dejaron ver en la capilla de Nuestra Señora de Begoña, a las afueras de Madrid, por lo que seguramente fueron directas al banquete nupcial. Tamara Falcó compartió una imagen de las tres con sus estilismos.
Isabel Preysler, junto a Tamara Falcó y Ana Boyer en la boda de Cristina Reyes
De esta forma, en un día en el que vieron la luz rumores de deslealtad de Hugo Arévalo, la nueva ilusión de Tamara Falcó, hacia la marquesa de Griñón, la que estuvo al lado de la chef fue su madre.
Isabel Preysler, en el cumpleaños de Alberto Alcocer
Horas más tarde, Isabel Presyler acudió a la fiesta de cumpleaños acompañada de unos amigos. Con ella no fue Mario Vargas Llosa (86 años), quizá por el hecho de que Alberto Alcocer fuera del círculo de amigos del fallecido Miguel Boyer y el premio Nobel no considerase adecuado asistir de la mano de la viuda del exministro. Isabel eligió para la ocasión un vestido de lentejuelas gris perla, abrigo de piel, y unos espectaculares pendientes.
A la fiesta del cumpleaños del financiero, asistió también el matrimonio formado por Cari Lapique y Carlos Goyanes, quienes, a su vez, se perdieron otra boda, la de María Castellanos y Alastair Cotto, a la que sí asistió Miriam Lapique.
Alberto Alcocer, que estuvo casado con Esther Koplowitz, con quien tiene tres hijas, está actualmente casado con Margarita Hernández, con quien tiene dos hijas más. Alcocer, junto a su primo Alberto Cortina, entonces casado con Alicia Koplowitz, (a los dos primos se les conocía como 'los Albertos'), fueron dos de los financieros más destacados en la década de los 80, época en la que Miguel Boyer fue ministro de Economía y, posteriormente, director general de FCC, la empresa de las hermanas Koplowitz.