Hace unos días Ariadna Cross, la hija de Fortu, dejaba muy preocupados a sus seguidores de Instagram al revelar a través de la red social que tiene un angioma cerebral, una malformación de los vasos sanguíneos que irrigan la zona encefálica. "Me voy ahora al Gregorio Marañón porque me toca resonancia del coco loco. Para el que no lo sepa y me pregunte, ¿qué te van a hacer? ¿Qué te pasa? ¿Qué te sucede? ¿Qué te ocurre? Pues bueno, ya os cuento… Tengo un angioma en el cerebro”, contaba la exconcursante de 'Gran Hermano'.
"Hace no mucho, el año pasado, fui a la última revisión con mi neurólogo, que yo iba al Hospital de Arganda del Rey. Y nada, me mandó al Gregorio Marañón, al neurocirujano, para que lo valorase a ver qué pasaba con eso, si había que hacer algo o no”, explicaba Ariadna desde su Instagram. “Todos los años me hacen una resonancia de control para ver cómo está”, añadía.
Tras hacerse la resonancia, Ariadna comunicó a sus seguidores que ya se realizado hecho la prueba y expresó su deseo de que todo fuese bien. "Ya he salido de la resonancia. Estoy viva. Espero que esté todo bien, que no tengan que hacerme nada, que ya me dejen en paz y dejen de hacerme resonancias porque lo paso fatal… Aunque estaban como muy serios. No sé, a mí eso me raya. Pero bueno, seguro que no es nada y es que eran así…”, contó desde su Instagram la hija de Fortu.
Los últimos meses no han sido fáciles para Ariadna. El pasado mes de noviembre la hija de Fortu contó que, tras sufrir un aborto natural había perdido al bebé que esperaba. Ahora, aunque preocupada por el angioma cerebral que padece, Ariadna se muestra optimista. La hija de Fortu está muy ilusionada con su faceta de maquilladora profesional, algo que se refleja en su Instagram, donde también deja ver lo volcada que está en su hija Nirvana, uno de sus grandes apoyos, y lo unida que está a su familia.