^{_{Receta: New York roll casero con crema de cacao y almendra}}

Si te hablo de un híbrido vas a pensar que me he vuelto loca y que ahora escribo de coches. Pero hay otros híbridos en el mundo aparte de los de 4 ruedas... Postres, por ejemplo.

Hace ya unos años que se puso de moda la pastelería híbrida, la que fusiona dos recetas en una, consiguiendo nuevos postres –con más o menos fortuna– que enamoran a foodies de todo el mundo. Y la masa de croissant es una de las que da más juego a los pasteleros.

El primero en jugar con ella fue Dominique Ansel, francés afincado en Nueva York, en 2014. Fue el creador del cronut (croissant + donut), y dice que encontró la fórmula perfecta al décimo intento: una masa de croissant con forma de donut, frita, rellena de crema y glaseada. 

Más o menos al mismo tiempo, la pastelera Kate Reid, en Melbourne (Australia) inventó el cruffin (croissant + muffin), una masa de cruasán horneada en una cápsula de magdalena, que luego rellenaba y cubría con diferentes toppings (o no).

Otros híbridos menos populares son el croffle (croissant + waffle), básicamente un croissant aplastado y tostado en una gofrera; el croclair (croissant + éclair), un éclair elaborado con masa de croissant y el cragel (croissant + bagel), una masa hojaldrada a la que se da forma de bagel, luego se hierve y finalmente se hornea. Lo inventó el pastelero neoyorquino Scott Rossillo.

También la crookie (croissant + cookie), un croissant relleno y cubierto con masa de cookie que creó por diversión el panadero parisino Stéphane Louvard. Abrió un croissant por la mitad, le puso masa cruda de galleta dentro y encima y lo volvió a hornear. El éxito había llegado a su pastelería.

El híbrido con sello español es obra de Manu Jara, que desde su pastelería del barrio de Triana, en Sevilla, propone el torrisant (torrija + croissant), un croissant bañado en almíbar (especiado con miel de Aracena y perfumado con vino D. O. Montilla Moriles) y luego rebozado en azúcar y canela. Ideal para que todo el año sea Semana Santa.

Hace un año, Bimbo lo petó con su cruapán, un pan de molde con sabor a croissant de mantequilla que se hizo viral en las redes sociales. No había influencer que no lo probara o cocinara con él. 

New York roll, el último en llegar

Y en los últimos meses, el que arrasa es el New York roll, un croissant enrollado, relleno de chocolate (u otra crema dulce), cubierto con más chocolate y espolvoreado con algún topping dulce. De tanto verlo en Instagram y Tiktok no he podido vencer la tentación de probarlo. Si quieres verme in action, clica aquí.

Fueron los pasteleros Scott Cioe y James Belisle quienes inventaron el NY roll en su bistrot Lafayette Café & Bakery, en Manhattan, Nueva York, en 2022. Lo bautizaron como croissant Suprême y en poco tiempo se hizo famoso en el mundo entero gracias a las redes. Tanto, que ya hay pastelerías en las principales ciudades españolas donde se forman largas colas para conseguir uno de estos dulces. Pero si no quieres hacer cola (ni pagar los casi o más de 5 € que piden por uno), puedes hacerlo tú en casa. ¡Es más fácil de lo que parece! 

Muchas gracias por estar al otro lado de la pantalla.

El viernes que viene, más.