Charlene de Mónaco (45 años) arrastra desde hace más de un año rumores sobre un delicado estado de salud que iría más allá de lo físico. Cansada de comentarios malintencionados que tal y como confesó el príncipe Alberto (65 años) provocan un "gran dolor" en su mujer, la sudafricana ha dado un paso al frente para zanjar de una vez por todas los rumores.
La primera dama de Mónaco ha concedido su entrevista más sincera al diario Monaco Matin, una charla en la que ha querido dejar claro que se encuentra perfectamente. "Me siento en plena forma, feliz y serena", ha confesado Charlene. Después de dos años volcada en su recuperación, puede asegurar que se encuentra con ganas de retomar la natación "para recuperar un poco más de energía y sentirme más fuerte".
Su mejoría es real y se ha traducido en una agenda oficial mucho más agitada a lo que nos tenía acostumbrada. Su última aparición pública fue hace solo unos días, con motivo del primer día de colegio de sus hijos Jacques y Gabriella, de nueve años.
Charlene de Mónaco revela el gran cambio al que han tenido que hacer frente sus hijos, Jacques y Gabriella
Los mellizos Jacques y Gabriella son los grandes protagonistas de la entrevista y de su vida. Al margen de su papel institucional, si hay algo que hace feliz a Charlene es pasar tiempo con sus hijos.
Además, coincidiendo con la vuelta al cole, Charlene contaba que los pequeños estaban muy "ilusionados" por volver a clase y retomar el contacto con sus amigos, un año marcado por un cambio muy importante en su educación. Después de haberse reunido con el claustro de profesores, Charlene y Alberto habrían decidido separar a los pequeños. "Es la primera vez que no estarán en la misma clase. Es un gran paso para ellos. Y me parece bien", confesaba a la mencionada publicación.
De Gabriella cuenta que es una niña “espontánea" y "confiada", mientras que Jacques “es más reservado, pero muy observador”, dos actitudes muy diferentes que salen a la luz en cada una de sus apariciones públicas.
El objetivo de Charlene es dar a sus hijos "una buena educación", valores con los que cojan confianza en sí mismos y puedan disfrutar de una infancia feliz a pesar de su posición.
Charlene de Mónaco se desmarca de los rumores de separación del príncipe Alberto
A lo largo de la entrevista Charlene se ha mostrado muy cómoda, de ahí que haya decidido no abordar un tema tan polémico como la realidad de su matrimonio con el príncipe Alberto. Silencio absoluto. Y es que en los últimos tiempos se ha llegado a decir que la sudafricana vive en Suiza, lejos de su marido, de sus hijos y de todo lo relacionado con el Principado.
Fue el soberano quien estallaba hace unos días cansado de desmentir continuamente la crisis de su matrimonio. "No entiendo todos estos rumores que hacen daño, sobre ella viviendo en otra parte, encuentros con cita previa para vernos. Falsedades", se quejaba en declaraciones al Corriere della Sera. "Charlene tuvo dificultades hace muchos meses, pero ahora gracias a Dios ha terminado. Ella me apoya al frente del Principado. No estamos las 24 horas del día pegados el uno al otro, también somos una pareja de trabajo y el trabajo a veces sólo nos permite vernos al final de una larga jornada llena de eventos", se justificaba.