Merece la pena prestar especial atención a esta zona del rostro porque si no está cuidada nos envejece muchísimo. Ponte a ello lo antes posible.

Para evitar las arrugas

Busca cremas con ingredientes que ejerzan un efecto 'plancha' sobre el contorno de los ojos (llevan proteínas de trigo), que sean nutritivas (aceites vegetales, ceramidas) y con activos que rellenen las arrugas (ácido hialurónico, retinol). También debes buscar pigmentos reflectores que le devuelvan a la mirada luminosidad, contribuyendo, además, a difuminar los pequeños surcos. Recuerda aplicar siempre los cosméticos para esta delicada área dando pequeños golpecitos (sin tensar la piel), para activar la microcirculación.

Sin ojeras

Es un mito que las ojeras sean solo fruto del cansancio, aunque este contribuye a acentuarlas.

Cuando son de un color violáceo, los trastornos circulatorios suelen estar tras ellas, aunque también pueden deberse a que la piel, como consecuencia del paso de los años, se ha ido volviendo más fina. Si las tuyas tienen este tono, busca cosméticos formulados con ingredientes como el ginkgo o la vitamina K, que son vasoprotectores, y el silicio, que devuelve a la piel parte de la densidad perdida. Si quieres disimularlas, el corrector que te conviene es el de tono amarillo. Distribúyelo desde el lagrimal hasta el centro del ojo y luego difumínalo.

Si, por contra, tus ojeras son de un color amarronado, lo más seguro es que en tu caso haya una producción excesiva de melanina. Minimizar esas ojeras pasa por utilizar cada día alguna crema con activos aclarantes (como los derivados de la vitamina C). Para disimularlas, deberás aplicarles encima un poco de corrector. No importa que sea en crema o en barra, pero sí es importante que su tono sea algo más claro que el color de tu piel. Aplícalo cómo te hemos explicado antes.

Acabar con las bolsas

Las hay de grasa, que solo se eliminan mediante cirugía; o como consecuencia de la retención de líquidos. Estas últimas se reducen muchísimo si se emplean geles drenantes. Lo son los que están formulados con cafeína, hamamelis, hiedra... Lo ideal es que busques productos que lleven un aplicador roll-on: el masaje que efectúan también contribuye a 'vaciar' la bolsa.

Por otro lado, recuerda que después de media tarde deberías desterrar de tu alimentación cualquier alimento que contenga demasiada sal (conservas, por ejemplo, o embutidos) y el alcohol: de esta forma, la retención de líquidos será menor y tendrás menos propensión a las bolsas el día siguiente.

Algunas precauciones que debes tomar

En la calle. Para mantener su juventud durante más tiempo debes, por ejemplo, llevarlos protegidos en el exterior la mayor parte del tiempo, incluso en invierno y aunque no haga sol (pero puede hacer viento, por ejemplo). Utiliza unas gafas con cristales homologados. Con ellas puestas, evitarás hacer guiños continuamente, que es lo que origina las patas de gallo.

Al final del día. Evita desmaquillártelos de forma brusca. Lo mejor es que emplees un agua micelar, que ni necesita aclarado ni engrasa la zona. Usa un algodón distinto en cada uno de los dos ojos.