Rosquillas árabes con yogur, suaves y esponjosas (con vídeo)

Si eres fan de las rosquillas, tipo dónuts, y te las comerías a todas horas, anímate a prepararlas tú misma en casa, te contamos cómo, paso a paso

Cocina Fácil

Rosquillas árabes con yogur
Cocina Fácil
Rosa Mestres
Rosa Mestres

Redactora colaboradora

Con una masa supertierna, esponjosa y deliciosa, estas rosquillas, tipo dónuts, conquistarán a todo el mundo, especialmente a los pequeños de la casa. Si siempre las compras ya hechas y nunca te has atrevido a prepararlas en casa.

Hoy te traemos una versión que está muy, muy rica. Te aseguramos que, a la que las pruebes, las vas a elaborar cada dos por tres.

Son perfectas para las meriendas de los niños o si, de vez en cuando, quieres darte un caprichito dulce, estas rosquillas árabes son laboriosas, pero no presentan ninguna dificultad a la hora de hacerlas.

La única indicación es que necesitan mucha paciencia y respetar el tiempo para que la masa suba bien. Ten en cuenta que para que la masa de estas rosquillas quede muy esponjosa debe levar dos veces. Primero, unas 2 horas y, luego, una vez ya estén formadas, unos 20 minutos.

Rosquillas árabes, estilo dónuts
Para 4 personas
Ingredientes
  • 800 gramos de harina tipo 00
  • 400 mililitros de agua ligeramente tibia
  • 50 gramos de azúcar
  • 125 gramos de yogur natural
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 30 gramos de mantequilla
  • 24 gramos de levadura fresca u 8 de levadura seca
  • Piel de 1 limón
  • Aceite de maíz para freír
  • Azúcar para rebozar
Paso a paso
  1. Prepara la masa

    Coloca el agua tibia en un cuenco y agrega la levadura, la piel de limón rallada y el azúcar. Remueve para que los ingredientes queden bien mezclados. Añade el yogur y vuelve a remover.

  2. Agrega la harina por tandas

    Incorpora la harina, en cuatros tandas, procurando remover bien cada vez para que quede bien integrada y sin grumos. Antes de añadir la tercera tanda de harina, agrega la sal y sigue removiendo.

  3. Amasa con las manos

    Añade la mantequilla troceada y el resto de harina y amasa con las manos hasta que consigas una masa suave y manejable.

  4. Deja reposar

    Vierte un chorrito de aceite, amasa para que se integre y forma una bola. Envuélvela con papel transparente de cocina, tápala con un paño y déjala reposar unas 2 horas para que fermente.

  5. Extiende la masa

    Transcurrido el tiempo indicado, vuélvela a amasar suavemente y colócala sobre una superficie enharinada. Extiéndela con un rodillo.

  6. Forma las rosquillas

    Con ayuda de un aro de repostería forma los círculos y, luego, con otro más pequeño, el círculo interior. Recoge los restos de masa que han quedado, forma una bola y vuelve a extender con el rodillo para hacer más rosquillas. Colócalas todas en una bandeja y déjalas levar unos 20 minutos.

  7. Fríelas en abundante aceite

    Calienta una sartén con abundante aceite y fríe las rosquillas hasta que estén doraditas. Déjalas sobre papel absorbente de cocina para que suelten el aceite y rebózalas con el azúcar.

Consejos para un resultado perfecto

  • A la hora de extender la masa, enharina un poco el rodillo. Así no se pegará y podrás trabajar mejor.
  • En la segunda fermentación, deja las rosquillas bastante separadas entre sí porque volverán a levar y doblarán su volumen.
  • En el momento de freír, procura que el aceite esté caliente, pero no humeante. Y no pongas muchas a la vez. Así la temperatura del aceite no bajará y quedarán bien doraditas.
  • Si quieres glasear las rosquillas para que se parezcan más a los dónuts de las tiendas, mezcla 125 g de azúcar glas con 1 clara de huevo y 25 ml de agua, hasta obtener una salsa fluida y blanquecina, pero no líquida. Una vez las rosquillas estén templadas, pincélalas con la glasa por todos los lados.

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