Meghan Markle está celebrando en Nueva York su baby shower junto a sus personas más cercanas, entra las que incluye diseñadoras como Amal Clooney y amigas de reparto de la serie Suits como Abigail Spencer, entre muchos otros. Una celebración por todo lo alto e íntima que ha terminado con su look más casual hasta la fecha. Y es que, por raro que parezca, la Duquesa de Sussex ha dejado a un lado sus clásicos stilettos para lucir el estilismo que creías que nunca le ibas a ver: unas deportivas Primero fue Sarah Jessica Parker, otro icono de la moda, quien se atrevió con el chandal, esta prenda casi prohibida para muchas y ahora es Meghan quien demuestra que de vez en cuando también le apetece apostar por la comodidad.
Y, si hay una prenda cómoda, esos son los leggins. Meghan apuesta por un total look negro con estas mallas de Lululemon, una sudadera con capucha de Ingrid & Isabel, unas sneakers de Adidas, una gorra de Rectify y el abrigo camel que le daba ese toque de color.
Pero, si algo ha llamado la atención ha sido el detalle perfecto para futuras mamás: un colgante de oro de la firma Jennifer Meyer, con la palabra "mommy", valorado en 748 euros.
El conjunto más sencillo y desenfadado que hemos podido ver lucir a Meghan Markle y que nos ha confirmado que de vez en cuando viene bien bajarse de los taconazos y mostrar nuestra imagen más natural.