Quentin Tarantino se reunió con Uma Thurman, John Travolta y con el productor Lawrence Bender para celebrar en Cannes los 20 años de ‘Pulp Ficton’, una de las películas clave del siglo XX.

Es muy curioso lo que sucede con este film de historias cruzadas de la factoría Tarantino: aunque parece que fue ayer cuando se estrenó, desde el primer momento de su proyección la película se convirtió en todo un fenómeno, ascendiendo como un bólido al olimpo del celuloide. Un clásico instantáneo sin precedentes.

Con una proyección en la playa, el director, junto con los actores y el productor de la cinta, volvieron a disfrutar de las brillantes líneas que en su día escribió Quentin Tarantino y que seguro que no esperaba hacer historia del cine con conversaciones sobre el nombre de una famosa hamburguesa… Ahora todo esto, al igual que el baile a ritmo de ‘You never cant’t tell’, los masajes en los pies, y la reanimación tras una sobredosis, forman parte ya de nuestro imaginario.

En estos 20 años, Quentin ha vuelto a trabajar con Uma, a quien considera una especie de musa, ofreciéndole uno de los personajes más importantes de toda su carrera: la novia ensangrentada en ‘Kill Bill’. Con Travolta no ha vuelto a trabajar, pero la llamada que le hizo para que este interpretara a Vincent Vega, supuso la inyección que este necesitaba hace 20 años, cuando ya prácticamente nadie se acordaba de él más que por su Danny Zuko o por el Tony Manero de ‘Fiebre del sábado noche’.