Esta semana me fui con mi familia a ver el Mercat de Santa Llúcia. Es un mercado navideño que se celebra cada año en los alrededores de la catedral de Barcelona. Los niños alucinan con los cientos de abetos, pesebres y 'Cagations' que están expuestos.
Aunque no es la única feria navideña de mi ciudad, sí es la más antigua. Y por eso es una tradición en mi familia ir a pasear todos juntos para comprar los adornos navideños en las diversas paradas, ya que hay unas 300, ¡sin exagerar! Aunque no todos venden artículos directamente relacionados con la Navidad. Hay algunas paradas de juguetes típicos de feria, globos de helio, marionetas, pañuelos, bisutería, etc.
Lo que os aconsejaría es que os pasárais dos veces por la feria: una de día y otra de noche. El alumbrado navideño es espectacular de noche y, en cambio, las paradas se ven mejor de día y disfrutas más del encanto particular que se respira ahí.
Mi hija Martina disfrutó mucho con el 'Tio de Nadal' gigante que pusieron en uno de los extremos de la Plaça Nova. Los niños golpean un tronco enorme con un pequeño palo mientras cantan la canción popular para que el tronco se vuelva mágico y les dé regalitos para todos.
Esta época tan especial trato de inmortalizarla y más desde que tengo a las pequeñas. Martina ya tiene su propia cámara Instax, eso sí, de Hello Kitty y la verdad que no se le da nada mal. Se pasa el día haciendo fotos a Carlota y enseñándole a todos los que vienen a casa sus avances. ¡Es lo que tiene el revelado instantáneo!
Por otra parte Mark y yo usamos la Instax Wide 300 que aunque no tiene los bordes de las fotos tan divertidos como la anterior es igual de fenomenal para las fotos en grupo y así salimos toda la familia.
Os dejo un montón de fotos con la gente que más quiero y espero que vosotr@s también inmortalicéis esos momentos.
Agradecimientos: Fujifilm. www.fujifilm.eu/es