Pronovias cerró anoche la Barcelona Bridal Week en un majestuoso desfile que tuvo lugar en el Palau Nacional de la Ciudad Condal. El primero desde la trágica desaparición de su diseñador de cabecera, Manuel Mota, el pasado mes de enero, y en el que la firma de Alberto Palatchi presentaba la primera colección de Atelier Pronovias. En sus vestidos están presentes las sedas, el encaje francés, el rebrodé, el chantilly, la gasa, la garza y el tafetán, combinados con juegos de encaje y pedrería y sinuosas transparencias.

Desfile de modelos internacionales

El desfile lo abrió la modelo rusa Anne Vytalistina, ocho veces portada de la prestigiosa revista Sports Illustrated. Tras ella, por sorpresa, apareció su compatriota Irina Shayk. La novia de Cristiano Ronaldo se vistió de blanco, de momento, solo sobre la pasarela.

La modelo checa Petra Nemcova, superviviente del tsunami que arrasó Tailandia, Stacy Kleiber, novia de George Clooney, Francesca Eastwood, hija de Clint Eastwood o Rainey Qualley, hija de Andie McDowell, cerraban el 'front row' más internacional del desfile.

Lourdes Montes: "No estoy nerviosa, lo tenemos todo muy organizado"

Lourdes Montes, que prepara su próxima boda con Fran Rivera, no quiso perderse el desfile, aunque ya tiene muy claro cómo será su vestido de novia. "Es un diseño mío, sabía perfectamente lo que quería", fue el único detalle que insinúo del modelo que lucirá el día más especial de su vida. Sobre los preparativos, aseguró que de momento logra mantener la calma: "No estoy nerviosa, lo tenemos todo muy organizado". Para ella y para Fran, pasar por el altar no ha sido una decisión tomada de la noche a la mañana, sino madurada y lógica tras unos años de relación. "Lo hablamos, no fue una cosa de sorpresa. Casarse es el siguiente paso cuando todo va bien, formalizar las cosas", aseguraba. Algo que tendrá que esperar, por ahora, son los hijos, aunque ser madre es algo que tampoco descarta. "De momento no. Primero la boda y luego, los niños", aseguraba.

Raquel Jiménez: "No estoy pasando un buen momento"

Menos locuaz fue la exnovia de David Bisbal, que de nuevo evitó hablar de su ruptura. Raquel Jiménez, que pasó como una exhalación por el photocall, solo se detuvo ante la prensa para puntualizar que algunas cosas que se están poniendo en su boca (que David es un tacaño y que había mantenido una relación con una bailarina) no son ciertas. "Lo único que tengo que decir es que quiero que demostréis que lo he dicho yo, porque he oído algunas cosas que se tienen que demostrar", aseguraba ofendida. "No quiero estas cosas, porque no estoy pasando un buen momento", confesaba visiblemente emocionada, mientras la rescataban de la prensa para evitar ser sometida a más preguntas incómodas.