Después de rodar el final de ‘El Príncipe’, que vieron el martes cinco millones de personas, Rubén Cortada, el ya inolvidable Faruq, volvía a Cuba e invitaba a algunos amigos del rodaje a visitar su tierra.

Tras conocer la noticia, volamos hasta La Habana siguiendo su huella, dispuestos a descubrir dónde vive el actor y sabiendo que hace unos meses se compró un piso allí. Además, queremos saber más de su pasado, conocerlo a fondo, entender su historia, su timidez, su nostalgia por Cuba, por su familia, sus reservas para hablar de ella y de su vida cubana. Pero cuando llegamos a su tierra, descubrimos que sus vecinos allí nos describen a un Rubén Cortada que nada tiene que ver con el guapo actor que conocemos en España.

El reportaje completo, esta semana en nuestra revista.