Es tiempo de vacaciones y de descanso para muchos de nuestros famosos y entre ellos se encuentra el tenista Rafa Nadal, quien salió a navegar por aguas del Mediterráneo junto a su buen amigo Carlos Moya.

Juntos disfrutaron de una jornada marinera en la que no les acompañaron sus respectivas parejas. Así, por la cubierta del barco no hubo ni rastro de la actriz Carolina Cerezuela y sus hijos, ni tampoco de Xisca Perelló, la discreta novia del número cuatro del mundo en la ATP.

Vimos a los mallorquines en traje de baño luciendo sus tabletas y demostrando su buena forma física, tirándose desde el barco al mar.

Los dos amigos tuvieron tiempo de charlar y ponerse al día de sus planes más inmediatos. Así, seguro que Nadal le comentó que pronto se marchará a
Montreal, Cincinnati y a Estados Unidos, donde tiene sus próximos compromisos profesionales.
Sin embargo, mientras llega ese momento, sigue disfrutando de la compañía de su familia y amigos, que le llenan de energía.

La amistad entre Nadal y Moya viene de lejos, pues cuando Rafa estaba comenzando en el mundo del tenis Carlos era uno de los grandes de la raqueta en nuestro país. Esto y el hecho de ser paisanos hizo que Nadal mostrase su gran admiración por Moyá y entre ellos surgiese una bonita amistad, que se prolonga a lo largo de los años, pese a que ya apenas se ven, dados los compromisos profesionales de ambos por toda la geografía mundial.

Estas jornadas de relax de Nadal las combina con duras sesiones de entrenamiento, pues quiere llegar en una magnífica forma física a sus nuevas citas deportivas y sin tropiezos como el que tuvo en Wimbledon, donde cayó en la primera ronda frente al belga Steve Darcis.