Afortunadamente, Johnny Depp (51) ha decidido poner coto a su adicción al alcohol y los primeros síntomas de su rehabilitación comienzan a notarse. De entrada, lo vemos con algunos kilos de más, lo cual no deja de ser un efecto secundario absolutamente normal cuando se abandona una adicción, ya sea el tabaco, el alcohol u otro tipo de sustancias. Este lunes lo vimos en la première londinense de 'Mortdecai', en compañía de su novia, la actriz Amber Heard (28), y su tripa llamó bastante la atención. Igualmente, participó en una entrevista televisiva en la que sorprendió su aspecto desaliñado, pero no su actitud, pues estuvo recordando cómo jugaba a muñecas con su hija Lily Rose, que ahora tiene 15 años y ha debutado en el cine con la película 'Yoga Hosers'. "Estaba nervioso al principio, pero luego estuvo fabulosa", dijo el orgulloso papá.

 

Johnny Depp estaba dejándose arrastrar por su adicción al alcohol, pero el bochorno sufrido el pasado 16 de noviembre, cuando subió totalmente borracho a presentar un premio en los Hollywood Film Awards, sumado al últimatum que le dio su novia, hicieron que el actor se replanteara su futuro. Por el bien de su salud, Depp decidió retirarse provisionalmente de la actuación para rehabilitarse y las productoras, entiendiendo su situación, le han permitido ausentarse de algunos actos de promoción de las películas en las que ha trabajado y que están pendientes de estreno. Sin embargo, y puesto que parece que está recuperándose favorablemente, Johnny ha vuelto a la promoción y a conceder entrevistas. A su lado, Amber, quien se muestra muy feliz de que su novio haya retomado las riendas de su vida.