Cuando eres un miembro de una Casa Real no te puedes descuidar ni un solo segundo… Mirad a Guillermo de Inglaterra que se le fue ‘el santo al cielo’ en uno de los actos homenajes al cumpleaños de su abuela, la reina Isabel II, y esta misma tuvo que pedirle que prestara atención y se pusiera en pie como manda la tradición. El toque de la monarca es ÉPICO, pero la cara de despiste del padre de George y Charlotte no se queda atrás.