¡Uy! ¡Casi! Esta fan del príncipe Harry por pocas consigue su objetivo: plantarle un dulce beso en la boca al tío de Carlota de Cambridge, pero el interesado se anduvo rápido y le hizo una pedazo de ‘cobra’ como hemos visto pocas.
Victoria, la fan desaforada, se plantó en la ópera de Sídney con la intención de pedirle matrimonio al joven y que este le dijera que sí (de ilusión también se vive, no juzguemos). Situada en primera fila, ataviada con una pancarta con el mensaje escrito (para que no quedaran dudas) y con el mejor completo de todos: una tiara como sacada de un cuento Disney. La chica, de 21 años, es de las que aún creen en los cuentos de hadas y pensó que esa era su oportunidad de cumplir su sueño.
Harry, que ya sabemos que tiene debilidad por los disfraces ridículos, en cuanto la vio se acercó a saludarla. Craso error, pues si no se llega a andar con ojo, le roban un beso. El chico quiso tener como detalle de cortesía con Victoria un casto besito en la mejilla, pero a la joven con tiara, esto le supo a poco ¡lo quería enterito para ella! Por lo que le hizo el clásico ‘truqui’ de cambiar la dirección de la cabeza y conseguir de manera 'accidental' (sí, sí, claro) que sus labios se cruzasen. Suerte que Harry está curtido en esta clase de batallas y que tiene unos reflejos felinos, porque el hermano de Guillermo consiguió desviarse de la trayectoria de la fan y acabar con sus sueños de ser la nueva Kate Middleton. Lástima, porque con esa tiara le veíamos madera de duquesa.
Por Conchi Álvarez de Cienfuegos