Navidades famosos
· Enrique Ponce
Enrique Ponce, primeras sonrisas tras el fallecimiento de su cuñado
Las fiestas de Navidad son una época en la que hay que sacar lo mejor de uno mismo para ayudar y hacer sonreír a quienes lo están pasando peor. Por ese mismo motivo el torero Enrique Ponce no dudó en vestirse de paje real para hacer llegar la ilusión a los más pequeños del hospital Virgen del Rocío de Sevilla.
Adelantándose a los Reyes Magos el diestro llegó al centro médico en un majestuoso carruaje tirado por caballos desde el que repartió saludos y caramelos a los niños que se congregaron a las puertas del centro. Una vez dentro, encantado por estar con los niños, estuvo escuchando sus deseos y peticiones para el Día de Reyes. Los más pequeños estaban fascinados por la visita, al igual que Ponce, quien no escatimó en mimos con los niños enfermos.
El torero, consciente de la ilusión que tenían todos por su visita, compuso la mejor de sus sonrisas. Algo que sin duda no le resultó fácil, pues está pasando por unos momentos muy duros tras por el repentino fallecimiento del hermano de su mujer, Victoriano Cuevas el pasado 22 de diciembre.
El hermano de Paloma Cuevas, esposa de Enrique, falleció a los 41 años de manera súbita debido a un infarto. Una triste noticia, en plenas fechas navideñas, que sin duda ha sido el golpe más duro para la familia en este 2014. Aun así, haciendo de tripas corazón, el torero demostró que la felicidad de los niños y sus caras de ilusión bien merecían su visita al hospital y no dejó de sonreír ni un instante.