La última gala de los Oscars sigue dando que hablar. Ahora desde Irán, desde donde nos han llegado unas imágenes de la cobertura que hizo su televisión de la ceremonia. A los responsables de los informativos no les hizo nada de gracia el escotado vestido metalizado firmado por Gucci que lució Charlize Theron. Es cierto que la actriz surafricana ha estado más acertada con su estilismo en otras ediciones de los premios de la Academia, pero no era para la censura cutre que le hicieron durante el momento en que entregó un premio junto a Shirley MacLaine. Evidentemente, estamos siendo irónicos, pues no se ha tratado de una decisión estética, sino por los problemas de represión en contra de que la mujer muestre su cuerpo. En el vídeo se puede ver un efecto tan torticero que censura, y mal, las partes que quedan al aire de Charlize.

Crítica a parte merece el gesto flagrante que tuvo la cadena iraní con la astronauta Anousheh Ansari, quien fue la encargada de recibir de manos de Theron el premio a la Mejor Película Extranjera, que fue a parar a su compatriota, el director Asghar Fahardi. Asghar no acudió a recoger el premio como protesta a las medidas xenófobas de Donald Trump y Anousheh y su discurso reivindicativo directamente fue ignorado por el informativo de la televisión en Irán.