El próximo 23 de julio se cumplirán dos años de la muerte de Amy Winehouse. Y cuando apenas quedan 20 días para tan triste efeméride, el Museo Judio de Londres inaugura una exposición, Amy Winehouse, un retrato de familia'.
Una exposición que muestra como reliquias los objetos que pertenecieron a la cantante, sus portadas en revistas, sus imágenes, sus recuerdos y trata de recuperar las raíces de Amy, su vida antes de que creyéramos saberlo todo sobre su vida.
Por si Amy no hubiera tenido bastante en vida, una exposición recorre sus fetiches tras su muerte.
“Apuntarme a un gimnasio. Comprarme un piso. Vivir como esa bomba que soy”, se supone que escribió Amy en una lista de cosas por hacer, planeada mucho antes de ser famosa, y que alguien se encontró en la basura, fotografió y publicó. Dicen. Mentira, probablemente; qué más da.
“Tu dolor suena precioso”, tituló Boy George una canción que escribió en homenaje a Amy.
Precioso y muy rentable, después de los años.
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