¿Sabes cuáles son las señales de un ictus?

Cuando se produce un accidente cerebrovascular las células nerviosas del cerebro quedan privadas de oxígeno y nutrientes, por lo que rápidamente empiezan a morir. Por ello, aprender a detectar los síntomas de un episodio de ictus es esencial para poder actuar rápidamente y así reducir las secuelas. Estas son algunas de las señales que pueden hacerte sospechar de que tú o alguien de tu entorno lo está sufriendo.

1. Sensación de entumecimiento. En caso de sufrir un accidente cerebrovascular es frecuente sentir debilidad y falta de fuerza en una pierna o brazo, siendo especialmente común que el entumecimiento se dé en más de un miembro, en el mismo lado del cuerpo. Esta sensación puede acompañarse de hormigueo y disminución de la sensibilidad. También puede afectar al rostro: en este caso puedes sentir hormigueo y sensación de acartonamiento solo en parte de tu rostro. Es frecuente que durante un ataque de ictus puedas ver que tu boca se tuerce ligeramente y que tienes dificultad para sonreír o mover la boca. Pero no hay que confundir los síntomas de un ictus con el hormigueo que se siente cuando se nos duerme un brazo o una pierna a causa de encontrarnos en una posición incorrecta.
2. Una pérdida repentina de visión. Esta pérdida puede ser total, aunque con más frecuencia afecta solo a una de las zonas de la visión. Puede darse en uno o en ambos ojos. Cuando sufras este tipo de alteraciones en la visión de forma repentina deberías acudir tan rápido como te sea posible a un hospital. Pero ten en cuenta que hay otras afecciones que pueden causar alteraciones de la visión parecidas a las de un ataque de ictus (como una migraña con aura), por lo que es importante no alarmarse.
3.  Alteración de los demás sentidos. Cuando se está produciendo un accidente cerebrovascular se pueden dar también alteraciones en los otros sentidos, como el olfato, el gusto y la audición. En el caso del tacto, lo más frecuente es sentir hormigueo y pérdida de sensibilidad en una zona determinada.
4. La memoria falla por un momento. Una pérdida repentina de memoria es otro síntoma que debe alertarte. Generalmente, esta pérdida va acompañada de una sensación de confusión. Pero no te alarmes. Este tipo de amnesia no tiene nada que ver con las pérdidas de memoria que se producen con la edad; no debemos asustarnos si conforme nos hacemos mayores notamos que nos cuesta más recordar las cosas, especialmente si se trata de datos sin relevancia como qué se ha comido al día anterior
5. Dificultad para hablar o para comprender. Si de repente cuesta hablar o entender a los demás puede ser  un indicativo de ictus, sobre todo si te sientes confundida. Si te encuentras en una conversación y te empieza a costar articular las palabras, vocalizar correctamente o construir una frase o sientes que, de repente, no eres capaz de entender lo que dicen, pide ayuda.
6. Problemas en la coordinación. Otro de los síntomas característicos del ictus es la dificultad para coordinar movimientos. Esto se puede ver reflejado con dificultades para mantenerse erguido, pérdida del equilibrio, mareo y problemas para caminar.
7. Pérdida de conciencia temporal. A veces, el ictus puede acompañarse incluso de una pérdida de consciencia (una lipotimia). Pero solo suele ser indicativo de ictus si ocurre en conjunto con alguno de los síntomas neurológicos mencionados.

¿Cuándo debes preocuparte por un dolor súbito de cabeza?

Sentir dolor intenso de cabeza, repentino y sin motivo aparente puede ser indicativo de un ictus. No obstante, es importante no alarmarse debido a que también puede tratarse de una cefalea por otra causa. Pide ayuda si el dolor se acompaña de otros síntomas sospechosos como hormigueo o dificultad para mover una parte del cuerpo.