La hipertensión arterial afecta a 10 millones de españoles, y no siempre es fácil cumplir con las medidas recomendadas. En la mujer las cifras medias de presión arterial aumentan sobre todo tras la menopausia, debido al déficit de estrógenos unido a otros factores como el aumento de peso o el sedentarismo.

Recuerda lo básico

Los hábitos saludables. Debes hacer ejercicio (camina al menos media hora al día y sube escaleras para mantenerte en forma, si no sufres de las rodillas), evitar el estrés y cuidar tu dieta (aumenta el consumo de verdura y fruta y di adiós a los enemigos de la hipertensión: la sal, el alcohol, la cafeína y el tabaco). Y como mínimo acude a tomarte la tensión una vez al mes, ya que quizá no sepas que tienes hipertensión.
La medicación. La mejor forma de no olvidársela es tomarla siempre a la misma hora. Y ten en cuenta que algunos médicos comienzan a aplicar lo que se conoce como cronobiología para tomar los fármacos a una hora concreta, que depende de cada persona según cuándo se produzcan sus 'picos' (o subidas) de tensión.

Tus nuevos aliados

Los últimos estudios muestran que existen nuevos métodos naturales que ayudan a mantener a raya la tensión arterial:
Vitamina D. La carencia de esta sustancia –que interviene en la absorción del calcio– es un factor de riesgo de hipertensión en mujeres. Puedes conseguirla consumiendo pescados ricos en ácidos grasos omega 3 (como el salmón o el atún) o tomando cada día 15 minutos el sol.
Lácteos. Investigadores del Hospital La Fe de Valencia han publicado un estudio en el que revelan que las proteínas de la leche tienen sustancias (unos péptidos) que ayudan a controlar la presión arterial. Tómalos mejor desnatados si te sobra peso.
Cacao. Y algo similar ocurre con él. Un reciente estudio del Hospital Universitario de Colonia recomienda a las personas con hipertensión tomar 6 gramos de cacao al día (una onza de chocolate negro).
Sandía. Investigadores de la Universidad Estatal de Florida afirman que es otro de los alimentos imprescindibles para reducir la tensión porque dilata los vasos sanguíneos.

Infusiones que pueden ayudarte

Antes de tomarlas, habla con tu médico para saber si te convienen:
Espino blanco. Tómala en infusión, añadiendo una cucharadita de miel para no notar su sabor amargo.
Parietaria. Tiene un gran contenido en sales de potasio y flavonoides.
Betónica palustre. Bébela dos veces al día (preparada con 3 gramos de hierba seca en agua hirviendo 15 minutos).

No abuses de los refrescos

Según un estudio presentado en la XVI Reunión Nacional de la Sociedad Española de Hipertensión, las bebidas edulcorantes, de rápida absorción, también causan hipertensión si se ingieren en exceso.