La despensa de la salud ocular

El ojo, a diferencia de otros órganos, está muy expuesto al daño oxidativo que provoca el sol o los contaminantes. Pero los radicales libres que dañan sus células no solo vienen de fuera. El cuerpo también los genera y, en concreto, el ojo tiene una gran actividad metabólica en este sentido. De hecho, ciertos trastornos oculares se deben a estas sustancias. Por eso, una dieta rica en antioxidantes y nutrientes protectores es garantía de buena visión.

Los más sanos para tu vista

  • Luteína y zeaxantina que alejan la degeneración macular asociada a la edad (DMAE, que puede acabar incluso en ceguera). Estos carotenoides son absorbidos por la retina y protegen la mácula evitando su deterioro. También filtran los rayos ultravioleta. Toma mucha verdura de hoja verde (como las alcachofas) e incorpora las crucíferas (como la col) a tu dieta con regularidad.
  • Vitaminas C y E anticataratas. Son dos potentes antioxidantes que protegen el cristalino de la oxidación. También previenen los trastornos oculares asociados a la diabetes. Los cítricos, las fresas, los pimientos... son buena fuente de las primeras; las semillas de girasol, las almendras, los albaricoques secos, el pimentón, las aceitunas verdes... lo son de las segundas.
  • Betacarotenos para ganar agudeza visual. Se transforman en vitamina A en el organismo, clave para la salud de la retina. Aconsejables si hay poca agudeza visual o ceguera nocturna. Las zanahorias son especialmente ricas en betacarotenos.
  • Omega 3 hidratante. Evitan que la lágrima sea muy líquida y se evapore con facilidad, previniendo el ojo seco. Impiden la formación de vasos sanguíneos en el ojo y protegen del glaucoma. Consume más pescado azul, mejor si es pequeño (contendrá menor cantidad de mercurio).
  • Ojos menos sensibles a la luz con vitamina B12. Su carencia provoca fotofobia. La córnea también se irrita más y resulta molesto llevar lentillas si hay falta de vitamina B12. Las almejas y los mejillones aportan buenas dosis de esta vitamina.
  • Zinc para el buen funcionamiento de la retina. De hecho muchas personas mayores tienen deficiencia de este mineral, lo que puede relacionarse con mayor riesgo de DMAE. Lo encontrarás en el gérmen de trigo tostado, el chocolate (tómalo negro, sin azúcar añadido), el cangrejo, las semillas de la sandía (no las tires)...

Gimnasia de ojos a diario

De la misma manera que caminar mantiene en forma el corazón, los ejercicios específicos para la vista ayudan a mantener fuerte y tonificada la musculatura ocular. Dedica unos minutos al día a realizar la siguiente tabla.

1. Coge una revista o un libro e inicia la lectura manteniéndolo lo más cerca posible de los ojos. Aléjalo lentamente hasta estirar el brazo, vuelve a aproximar la página sin interrumpir la lectura y así hasta 25 veces consecutivas.

2. Sin mover la cabeza, mira primero a la derecha y después a la izquierda. A continuación repite el movimiento de arriba abajo y luego hacia las cuatro esquinas de la habitación. Cuando tengas práctica pasa a realizar la rotación visual recorriendo un círculo con los ojos unas veinte veces en cada sentido.

3. Dirige la mirada a la punta de la nariz y aguanta la postura unos segundos. Puede resultar un poco molesto al principio e incluso provocar una especie de mareo, pero es una de las mejores maneras de estirar la musculatura ocular. No fuerces en exceso.

4. Guiña los ojos varias veces. Cuando los cierres aprieta al máximo y en el momento de abrir relaja. Este ejercicio es como un masaje que permite eliminar los cuerpos extraños y ayuda a segregar lágrima.