El domingo por la mañana recibo un mensaje de Belén Esteban: “Jorge tú sabes que aunque hayamos tenido nuestras cosas siempre te he querido mucho pero ahora que he acabado tu libro te quiero mucho más. Cuando te vea me gustaría hablar contigo. Un beso muy fuerte y dale otro beso a P. de mi parte”. ¿Cómo no vas a querer a una compañera que te escribe mensajes como este? Por la tarde actuamos en el precioso Teatro Bretón de los Herreros, de Logroño, con el cartel de “No hay localidades”. Jamás había sido tan feliz.