Me gustaría regalarle a Tamara el último libro de Maruja Torres, ‘Diez veces siete’. No es responsabilidad de la Falcó haber nacido en un entorno tan aparentemente privilegiado.


Pero cuando la veo tan entregada a la Iglesia me gustaría que leyera a la Torres para que se diera cuenta de qué poco generosa fue –y sigue siendo– esa organización con la gente que verdaderamente sufre. Qué poco compasiva fue con los que perdieron la guerra y qué poca delicadeza demostró con esas personas que ellas llamaban descarriadas y que englobaban a tantísima gente. Quizás esa España tan reciente le suene a la Falcó a ciencia ficción. Puedo incluso llegar a aceptarlo. Entonces, lo que le pediría es que leyera a Maruja para que valorara la lucha que durante muchos años han tenido que llevar a cabo muchas mujeres de este país para que la misma Tamara pueda tener la libertad de no despegarse de su misal o de gastar sus fines de semana desparramando en Ibiza. Me ha gustado mucho el libro de Maruja Torres. Me ha hecho sentir un poco más vivo.