Por CONCHI ÁLVAREZ DE CIENFUEGOS

Se llama Desireé Cordero, tiene 21 años y está a punto de hacer realidad su sueño. La modelo podría convertirse el próximo 25 de enero en la nueva Miss Universo 2015.

Los expertos la consideran una de las candidatas más fuertes con su 1,78 m y sus medidas de escándalo. Además posee la simpatía necesaria y tiene la desenvoltura sobre la pasarela propia de un Ángel de Victoria’s Secret. Y su trabajo le ha costado. Desireé lleva preparando este momento desde hace tiempo. Clases de pasarela, jornadas intensivas en el gimnasio, perfeccionamiento de su expresión corporal con un profesor particular… Todo está medido y calculado en su carrera para hacerse con la corona, su objetivo inmediato.

A ella parece no dolerle en absoluto el cambio que pegó su vida cuando se convirtió en Miss España. Desde entonces no ha parado, era una carrera contrarreloj para medirse con las mujeres más bellas del mundo y sabía que para el 25 debía estar perfecta. Perfecta en apariencia y en actitud. Y parece que la confianza que tiene en sí misma no ha hecho más que ayudarla a alcanzar esta perfección de la que hablamos.

“Para mí significa un gran reto, ya que hace cuarenta años que no ganamos una corona. Sería una gran satisfacción conseguir este año la segunda corona, que creo que ya es hora de que España se la lleve”, recogía la versión latina de la revista People, uno de los medios que la dan como una más que posible ganadora.

El aplomo y confianza que demuestra lo ha conseguido gracias a su fe en sí misma, pero también a las palabras de apoyo que ha recibido de su chico, Álvaro Ruiz, hijo de Fernando Hierro, quien se ha volcado con ella y con el que lleva viviendo desde que la joven se trasladara de su Sevilla natal a Madrid para prepararse para hacer frente a la aventura de su vida.

¿Se convertirá esta española en la más bella del Universo? El resultado se conocerá el 25 de enero.