Por EL HOMBRE CONFUSO

Justin Bieber está preocupadísimo por su imagen. Hasta ahí sería normal para cualquier estrella del pop. Gran parte de su éxito depende de su físico, sus peinados, sus estilismos y todo lo que rodea a esta pequeña máquina de hacer dinero. Pero eso a Justin no le sirve. El cantante parece estar más obsesionado por acallar los comentarios que cuestionan su madurez y hombría que por contentar a sus devotas fans, y eso no para de acarrearle problemas. Entre su romance intermitente con la actriz Selena Gómez, su vídeos utilizando palabras de lo menos oportunas y sus salidas nocturnas, Bieber se ha convertido en todo un 'malote' de manual.

Desde hace unos meses, no paramos de verle con cara de malas pulgas, outfits de rapero del Bronx y conflictos nada propios de aquel joven que le cantaba al amor -recuerden, si es que han conseguido olvidarlo, la pelea a puñetazo limpio con Orlando Bloom-. Pero atentos, porque Justin está a punto de convertirse en un hombre nuevo. Sí, un hombre.

A sus 20 años, el cantante ha decidido afeitarse el bigote. Bueno, tampoco tenemos claro si podemos calificar como 'bigote' a la pelusilla postadolescente que lucía desde hace un tiempo, pero sí, Justin, por fin, ¡se afeita! Y para contentar a sus fans y demostrar al mundo entero que, además de rebelde, es un hombre de los pies a la cabeza, se ha grabado un vídeo en pleno acto. Con bien de espuma de afeitar y provisto de una maquinilla eléctrica -no sea que tenga que hacer esfuerzos con una convencional-, el cantante ha pasado este ritual de iniciación con nota, suponemos, ya que no nos ha dejado ver el resultado final. Al grito de “allá voy”, Justin ha dado buena cuenta de la pelusilla y ya está listo para pasar un par de meses más con su legendaria cara de bebé.

Pero desde aquí queremos decirle al cantante que no se preocupe. Afeitarse es un engorro y ya se dará cuenta con el tiempo, así que mejor no tenga prisa por volver a repetir el gesto. Además, ahora, ¡todos los hombres llevan barba!