Se rompe la pareja que nos hizo volver a creer en el amor: los Monchitos

Estamos completamente rotos de dolor. Tan hundidos como cuando conocimos que la historia de amor de Rose y Jack en ‘Titanic’ jamás podría ser. Los protagonistas de este romance trágico no son otros que Jesús Tomillero y David, también conocidos como ‘Los Monchitos’ en la 'Sálvame Snow Week'.

Artículo recomendado

¿Quiénes son los 'Monchitos' y por qué es lo más divertido de 'Sálvame Snow Week'?

Conocimos de su apasionada relación la semana pasada, y también nos dimos cuenta que lo suyo pendía de un hilo. Los continuos coqueteos de Jesús con otros hombres lo ponían muy difícil en esta unión asentada en las infidelidades. David parecía estar dispuesto a perdonar todo y hasta pidió a su chico que se casara con él. En el ‘Poli’ demostró que lo suyo no era ningún montaje, sino un noviazgo intenso como hemos visto pocos. Pero la ilusión de amor inquebrantable acabó por romperse el martes por la tarde, cuando Jesús se enteró de que su chico le dejaba. Ya no quería seguir. La vida que había escogido el árbitro de fútbol 7 no le convencía y solo deseaba una cosa, estar siempre juntos. Pero Tomillero parecía tener otros planes: entrar en GHVIP, ser gancho en ‘Mujeres y Hombres y Viceversa’… trabajar en televisión, en definitiva. Esto, sumado a las infidelidades, acabó con este noviazgo plagado de lágrimas.

"Dejo esta relación de mentiras y engaños, que me dejen en paz, no voy a coger el teléfono a nadie, que me respeten", contaba una de las mitades de Los Monchitos. "Te dejo, ya no hay más nada que hablar".

Tras escuchar que David lo quería dejar, Jesús, en un alarde de sinceridad, demostró qué es lo que de verdad le importa: el amor. “Pienso que no tenemos que dejar esta relación, han sido dos años maravillosos, ojalá podamos envejecer juntos y que nadie nos pare”, confesaba Tomillero por la noche en ‘Cazamariposas’.

El gesto del árbitro le honra, pero parece que los dos quieren cosas muy diferentes, pues Jesús ve su futuro profesional muy ligado a la televisión, una estampa en la que David no se ve.