Rocío Jurado se fue hace ya más de doce años y, cinco años después, se construyó el museo de Chipiona en su honor que a día de hoy sigue cerrado al público. A lo largo de estos siete años, el museo ha estado en boca de todos pero todavía no se ha convertido en una realidad debido a la negativa de Rocío Carrasco, hija de la cantante y también heredera universal, a dar su consentimiento al Ayuntamiento de Chipiona para la apertura. Sin embargo, el museo está más que preparado para empezar a recibir público y ahora, por primera vez, una cámara se ha colado en su interior para demostrarlo.

'El Programa de Ana Rosa' ha sido el programa encargado de mostrar imágenes inéditas del recinto, que en sus más de 1.000 metros cuadrados conserva todo un tesoro para los fans de la artista: fotografías, discos, vestidos... y multitud de objetos y recuerdos que formaron parte de la vida de 'la Más Grande'.

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ROCÍO FLORES

"El museo está perfectamente preparado para abrir, con sus tornos, su recepción...", ha explicado el reportero poco después de entrar. En el recinto pueden encontrarse "documentos, cartelería antigua", según explica Javier Díaz, concejal de turismo de Chipiona, así como portadas de discos e incluso una cafetería "totalmente equipada y preparada". Las letras de la fachada principal se encuentran todavía guardadas dentro del recinto, a la espera de tener el permiso para abrir y poder colgarlas fuera, así como la réplica de una estatua de la cantante.

Pero uno de los mayores tesoros que sigue guardado y protegido en el Museo de Rocío Jurado es la colección de trajes y vestidos que llevó la artista, como el que llevó en la despedida de Lola Flores o incluso el que lució el día de su boda con Ortega Cano. "Todavía con el aroma de ella", según el concejal.