Que si es una manirrota, que si ha causado un gasto extra al equipo de 'Las Campos', que si es una caprichosa, que si lo único que hacía era salir de fiesta por la noche... Los comentarios que ha generado el viaje a Estados Unidos del clan Campos podrían escalarse y coronarse. Especialmente, los que ha generado Terelu. Este lunes, la tertuliana volvía a 'Sálvame' y le ha tocado enfrentarse a los ataques y dardos que le han dedicado sus compañeros durante su ausencia. Ella se ha armado de paciencia, porque ya les conoce y porque sabe que, nuevamente, le tocaba estar en el punto de mira, un lugar en el que ya se siente como en casa.
Uno de los temas que más interés ha suscitado entre sus compañeros son las salidas nocturnas de Terelu en la Gran Manzana. Las noticias sobre el periplo yanqui de María Teresa y sus hijas ha llegado filtradísimo pero, aún así, ha salido a la luz y es jugosísimo. Al parecer, la mayor de las Campos lo primero que hacía al llegar al hotel era mirar "los mejores sitios de copas". Hay un Nueva York por cada visitante y este interés es tan válido como otro cualquiera para conocer la Ciudad que Nunca Duerme.
A pesar de todo, Terelu lo ha negado categóricamente. Y, teniendo en cuenta el estresante ritmo de rodaje que deben haber llevado, las copas las habrá disfrutado en un baño relajante de burbujas y en su habitación.
La otra gran cuestión que sobrevolaba sobre la colaboradora de Mediaset ha sido: ¿ha ligado? Ella, de nuevo, negaba que hubiera conocido a alguien especial en EE.UU. Kiko Hernández ha sido quien más la ha atacado y quien más noticias del viaje ha dado y, siempre directo y, le ha sacado el tema: "Dices que no has conocido varón y yo te digo que, en vez de estar por los perritos calientes, haber estado por conocer a alguien". Terelu le ha hecho un quiebro como ella solo sabe hacerlo y le ha contestado con su ironía habitual: "Kiko, hay prioridades".
"Terelu no ha dejado un puesto de perritos calientes sin probar", decía Raúl Prieto hace unos días desde la Gran Manzana.
Aunque por su respuesta parece que ha quedado rendida por los puestecitos de 'fast-food', lo cierto es que se moría por volver a nuestra tierra y a casa. Y es que ha acabado harta de la comida basura: "Se come fatal. Lo primero que pedí al llegar aquí fue una sopa y una albóndiga".