A juzgar por lo que se lee en redes, Belén Esteban no ha salido muy bien parada de su última entrevista en ‘Sábado Deluxe. El ‘belenazo’ no se ha saldado con una Esteban heroína, sino villana. A un numeroso porcentaje de la audiencia no le pareció bien que la de Paracuellos hiciera pública una conversación privada que mantuvo con María José Campanario mientras esta estaba ingresada en una clínica psiquiátrica. Tras esta polémica revelación, y de revolucionar a medio Twitter, Belén se tomó con deportividad las críticas y se marchó de fiesta con sus amigos.

Artículo recomendado

María José Campanario quiso reunirse con Belén a espaldas de Jesulín

Belenazo Deluxe

Lo adelantaba al final de su entrevista, que, tras su paso por el plató, iría a su local de fiesta preferido a brindar con sus íntimas, y cumplió la promesa. Es más, en redes también dio buena cuenta de ello: “Con mis amigos. Sara, te quiero”. Mientras las redes ardían, en la que ha sido una de sus entrevistas más polémicas, Belén continuaba con su vida, ajena a las ampollas levantadas. Parece que a la audiencia no le ha gustado que desvelara este episodio, que incluye a una persona que, en esos momentos, supuestamente, estaba recibiendo tratamiento psiquiátrico. Esto era muy distinto a cuando la Esteban habla de su enfrentamiento judicial con Toño Sanchís, en el que ambos están en las mismas condiciones. Aquí, Campanario estaba en clara desventaja.

También hay que conceder a Belén que no ha hecho nada distinto de lo que siempre hace: contar lo que ella ha vivido. Ha ofrecido su clásica entrevista de después de sus vacaciones, tan solo que, en esta ocasión, el titular más llamativo se lo ha ofrecido una persona que atravesaba sus horas más bajas.

Lo cierto es que Belén no podía imaginarse la repercusión negativa que tendría esta última entrevista. Mientras ella bailaba y se tomaba algo con sus amigos, las redes la acusaban de hacer negocio con la enfermedad de otra persona. Sería a la mañana siguiente, cuando lo descubriría todo: su imagen había sufrido un duro revés. Lo contaba así María Patiño: “Belén no está ni feliz ni pletórica tras su entrevista en el Deluxe”. Cómo podía imaginarse ella que, mientras que estaba bailando los últimos éxitos del verano que ya termina, las redes estarían ofreciéndole su cara más amarga. Esta vez, la resaca ‘post-belenazo’ le ha procurado serios dolores de cabeza.