Pierre Casiraghi 'está en capilla', como quien dice. A escasos días de darle el ‘sí, quiero’ a Beatrice Borromeo, el hijo de Carolina de Mónaco ha decidido despedirse de su soltería con una celebración por todo lo alto.

Según informa Josep Sandoval para La Vanguardia, el aristócrata escogió un castillo del Empordà catalán para festejar con algunos de sus amigos más íntimos. El joven, que se casará por lo civil el próximo 25 de julio, disfrutó de una celebración en la que no faltaron las viandas típicas de la zona y uno de los animales favoritos de su familia, los caballos.

El castillo de Requesens se llenó de niños bien que a buen seguro se relamieron con el pan con tomate, los embutidos y la paella que se dispusieron para los invitados. Invitados tan top, como su tío, el príncipe Alberto, que también quiso estar al lado de su sobrino en un día tan importante para él. Como manda la tradición, a la fiesta solo acudieron hombres, mientras que Beatrice, imaginamos, habrá tenido otra a parte con sus amigas y sus cuñadas.

El encargado de orquestar esta celebración con regusto a pan payés, fue Aldo Comas. Sí, el mismo Aldo Comas que está casado con Macarena Gómez, que llevó una estola de pelo a los Goya 2014 y que tiene un hijo llamado Dante. Este hombre multidisciplinar organizó todo para que la fiesta fuera un éxito, pero, sobre todo, para que nadie se fuera de la lengua y se guardara en estricto secreto para que el novio y sus amigos pudieran estar tranquilos. Por si alguno se está preguntando qué vincula al excéntrico marido de Macarena Gómez con la familia real monegasca, os sacamos de dudas: él, Andrea y Pierre estudiaron juntos en el mismo y elitista internado de Suiza. Y eso, quieras que no, une.

Si así fue la despedida de soltero, qué sorpresas no habrá en la boda, primero civil (el 25) en Mónaco, y luego por la iglesia (el 1), en  Isola Bella, Italia.