Esta semana, Pelayo Díaz sorprendía a todos compartiendo en su 'stories' de Instagram un vídeo donde se daba un cariñoso beso en los labios con el fotógrafo Pablo Sáez, la última pareja de David Delfín, a su vez exnovio suyo. Un gesto que hacía saltar todas las alarmas y que planteaban la pregunta razonable: ¿qué opinaría su novio Sebastián Ferraro? Según ha publicado LOC, el entorno más cercano de Pelayo, ha confirmado que su relación con el diseñador argentino se habría roto. Ambos habrían puesto punto y final a una historia de amor de un año hace apenas tres semanas. Justo el tiempo que, aproximadamente, llevarían sin compartir una imagen juntos en sus redes sociales.

Este duro golpe, que ha dejado a Díaz Zapico "bastante tocado" según su círculo íntimo, se une a otra difícil circunstancia que vivió hace apenas tres meses, nada más empezar el verano. Se trata de la muerte del diseñador David Delfín. Las circunstancias y los recuerdos compartidos con el hombre al que ambos habían querido, le habrían unido aún más a Pablo Sáez. ¿Habría nacido el amor entre el bloguero y fotógrafo? Las miradas que se dedicaban justo antes de que sus labios se encontraran así parecía indicarlo y los rumores de una posible relación empezaban a sonar con fuerza. Sin embargo, el interés sentimental de Pelayo sería otra persona, aunque también relacionada con el mundo de la moda, según informa LOC.

Los protagonistas aún no se han pronunciado, pero aseguran que la relación entre ellos habría concluido de forma amistosa. De hecho, ninguno de los dos habría dejado de seguirse en redes.

¿Estaba dando pistas de lo que le ocurría a través de sus cambios o han sido solo reflejo de su carácter subversivo? El estilista ha sometido a su 'look' a repentinos cambios. Una persona tan cerca como él a las tendencias ha hecho que nadie ajeno a su vida pudiera hacer cábalas de lo que le estaba ocurriendo a nivel personal. Pelayo estrenaba los 31 años rapándose el pelo, pero iba un paso más allá a finales de agosto tiñéndose de platino. También ha retomado sus rutinas como volver a publicar en su blog Kate Loves Me, después de dos meses, y volver a hacer deporte. Recientemente, Pelayo compartía un elocuente y claro mensaje en Instagram que ahora toma otro significado: "Jueves sin mirar atrás".