Dado lo llenas que tienen sus agendas y la distancia que les separa (ella vive en Madrid y él en Málaga), Paula Echevarría y Miguel Torres se han hecho expertos en encontrar huecos para vivir su relación. Y este fin de semana cumplía todos los requisitos para que la pareja viviera uno de sus fines de semana más intensos y románticos. Paula colgaba el jueves el uniforme para despedirse unos días del rodaje de 'Los Nuestros 2', localizado en Paracuellos del Jarama. Solo le quedaba un pequeño y agradable trámite laboral el viernes, antes de reunirse con su chico y dar rienda suelta a unos días de descanso, llenos de momentos inolvidables juntos. Ese mismo viernes, el futbolista cumplía con su equipo en su encuentro contra el Deportivo de A Coruña, en Riazor, donde perdían 3-2.

A pesar del resultado, estar todo el fin de semana con la actriz le devolvía la sonrisa. Y es que ambos conforman la viva imagen de la felicidad y el sábado elegían de nuevo hacer partícipes a sus amigos del buen momento que atraviesan. Con este gesto, dejan claro que Miguel está totalmente integrado en el grupo de amistades de Paula.

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La pareja se reunía en el restaurante Floren Domezáin (Madrid) con un nutrido grupo de amistades de Echevarría, entre las que se encontraban Las Pencas, Poty Castillo e Isabel Navarro. El coreógrafo y su mujer son una de las personas más cercanas a Paula y a David Bustamante, y han sido uno de sus grandes apoyos durante estos complejos meses previos a firmar el divorcio. El matrimonio continúa teniendo una buenísima relación con ambos sin que su amistad se resienta por este tipo de encuentros, cuyas circunstancias obligan a que ya no las vivan juntos como antaño. Por lo que han dejado ver a través de sus redes sociales, la actriz y el futbolista pasaron una velada divertidísima que se prolongó hasta altas horas de la madrugada.

El domingo, Paula y Miguel optaron por un plan más íntimo y salieron ellos solos a disfrutar de una romántica cena en el restaurante Chow Chow, especializado en cocina japonesa de fusión. Si el sábado Echevarría se decantó por un elegante y sexy traje de corte masculino de raso, el domingo tanto ella como su chico se vistieron de forma más casual y cómoda. La actriz y el futbolista son uno y parecen haberse vuelto inseparables, yendo de la mano en todo momento y dedicándose sonrisas y gestos llenos de cariño y complicidad.

Desde que salió a la luz su romance, la pareja no ha parado de dar muestras de que van en serio y no ha habido un paso en falso. Su relación avanza sin problemas y parece más asentada que nunca, haciendo que la distancia sea solo un pequeño obstáculo fácil de sortear. Y es que ya lo dicen: no hay nada que el amor no pueda vencer.