Con solo dos galas a sus espaldas, y una semana de convivencia en OT 2017, Noemí Galera se ha convertido en la heroína de la edición. La directora de La Academia haría cualquier cosa por sus ‘niños’, hasta el punto de encararse con el jurado, encargados de poner el ‘pero’ a las actuaciones. De todos ellos, la peor parada ha sido Mónica Naranjo.

Tener a toda una diva de la música como es la Naranjo tiene infinitas cosas buenas, pero, también, una mala: tener una diva de la música. Mónica es artistaza quiera o no quiera, y, a veces, con ese magnetismo tan suyo eclipsa a las estrellitas en ciernes. Por eso Noemí cuando dijo "los protagonistas deben ser los concursantes y su talento” más de uno desde casa pensó que eso iba por la de ‘Sobreviviré’.

Manu Guix, el profe del que nuestra Rosa de España se enamoriscó en su día, secundó las palabras de ‘jefaza Galera’. “Agradeceríamos que el jurado hiciera las valoraciones basándose en la actuación encima del escenario y no en los arreglos. Eso lo podemos discutir después". Mónica, con su mirada penetrante, contestó así a los profesores, “escoged otras canciones”.

También fue un ‘punto en boca aquí está la dire vasilona y reshulona’ cuando le tocó salvar a uno de los alumnos de la cuerda floja. Los profesores escogieron a Ana Guerra y la explicación que dio Noemí provocó una sonorísima ovación: “ella es más que una cara guapa”, pues es trabajadora, luchadora y se merece seguir con su formación.

Pero Noemí, la auténtica reina y señora de la edición, tampoco baila el agua a sus chicos. Recordemos que en la gala 0 no tuvo reparo alguno en calificar de “catastróficas” las actuaciones de los chavales. Como una madre que da tirones de orejas cuando toca, pero ¡ah, amigo! Si osas tocar a sus polluelos se abalanzará sobre ti como un halcón.

Secundamos una de las propuestas más repetidas en redes, ¿un 24 hr de Noemí sería posible?