Si algo tiene claro Marta López es que no quiere saber nada de Alfonso Merlos. Aunque en su momento estuvo muy enamorada del periodista, desde que saltó el escándalo por el noviazgo de Alfonso con Alexia Rivas, la colaboradora piensa que lo mejor que le ha podido pasar es que deje de formar parte de su vida. En su momento Marta contó varias cosas sobre su relación con el que por un momento creyó el hombre de su vida. Pero ahora ha ido más allá y ha hablado en exclusiva para nuestra revista, desvelando qué piensa en la actualidad del que fuera su novio y cómo vivió aquel momento tan duro en el que su ruptura estuvo en el punto de mira incluso a nivel internacional.

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Marta López Alfonso Merlos

Aunque en su momento habló bastante sobre los meses que duró su amor con Merlos, Marta asegura que “no he contado ni la cuarta parte de lo que sé y de lo que ha pasado, hay veces que me entra la risa, sinceramente”. La amiga de Kiko Hernández afirma que en gran parte, a la hora de guardarse algunas cuestiones para ella, “he ido con mucho cuidado para protegerle”. Sobre lo que contó en su momento, Marta tiene muy claro que no se arrepiente de nada. Eso sí, quizá hubiera evitado algunas cosas. “En algún momento no me debería haber reído, o cuando Jorge Javier me preguntó sobre sexo y dije que no encajábamos, o cuando se dijo lo de que él tenía las sábanas sucias… Yo contesté que no y luego me reía”, nos ha comentado. Algo que justifica porque “cuando entras a Telecinco a las diez de la mañana y sales a las tres de la madrugada, pues no puedes gustar a todo el mundo”.

Marta López

Al preguntarle en qué punto se encuentra su relación con Merlos o si ha vuelto a hablar con él desde que protagonizaron su sonada ruptura, Marta ha dicho que “ni he vuelto a hablar con él ni quiero hablar. No quiero saber nada más de él”. Si tuviera que trabajar con él “no tendría ningún problema en coincidir con Alfonso en un programa de televisión, le saludaría. No le guardo ningún rencor”. Pese a no guardárselo lo que si siente es “sensación de bochorno”, porque “pasado el tiempo, pensar que he sido su pareja me da vergüencita por todo lo que ha pasado”.